Ciclo Lectivo 2014
Alumnos de Pancanta estrenaron su escuela mejorada
En pleno cordón montañoso del Valle de Pancanta, con el Río Grande detrás, el gobernador de la provincia, CPN Claudio Poggi, firmó el decreto de llamado a licitación para construir una red de agua potable e inauguró obras de ampliación, refacción y mantenimiento en la Escuela Hogar N° 15 “Antonio Esteban Agüero”, ubicada sobre Ruta Provincial 9.
La directora Ramona Molina, recibió a la comitiva gubernamental y comentó que en ese tipo de establecimientos, donde comparten toda la semana, día y noche, con los estudiantes, se preocupan por formar alumnos creativos en la era de la tecnología. También, agradeció a un importante hotel por apadrinar a la escuela-hogar, donde se alojan 12 alumnos y 6 que viajan de lunes a viernes, con bonos de transporte, otorgados por el gobierno de la provincia.
“Casi que nos quedamos sin palabras cuando el gobernador dijo que iba a poner el agua acá”, reveló emocionado el ministro de Educación, Marcelo Sosa. “Están alejados del centro de San Luis, pero no del centro de nuestras preocupaciones”, señaló a la comunidad educativa del Valle de Pancanta, compuesta por un maestro para primer, segundo y tercer grado; la directora para cuarto, quinto y sexto, un docente de Plástica, y otro de Técnicas Agropecuarias.
En cuanto a las mejoras edilicias, en un plazo de casi seis meses, la institución robustecida con paredes de piedra, ahora cuenta con calefacción, más amoblamientos de cocina e iluminación, cielo raso y cierre perimetral. Asimismo, las obras de mantenimiento y limpieza abarcaron contrapisos, sendas peatonales, aberturas, cestos, y bancos.
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Al finalizar el acto, la directora, quien también es maestra en nivel inicial, recibió libros y juegos de encastre para el jardín, junto a la “Guía de Buenas Prácticas para el abordaje de la Violencia en el ámbito escolar”, formulada en diciembre del año pasado.
Mario Antonio Lucero, de 60 años, camina dos kilómetros los lunes y viernes junto a sus cuatro hijos para dejarlos albergados en la escuela. “Vivo, pasando el puente- explica-, donde se cruza El Chiflón y El Maray, -dos afluentes del Río Grande-. Tardamos como una hora y a veces los chicos vienen con botas de goma, porque hay mucho barro”, describe. Mientras el gobernador, observaba la luminaria en el playón deportivo, preguntó si había niños que faltaron. Le contestaron que dos, porque se había empantanado el vehículo. “Hay que salir a buscarlos”, ordenó.
Nota: Matías Gómez
Foto: Jesica Flandes
Video: Sergio Nieto
Edición: Fernando Testi
