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El Plan 20/30 abre oportunidades en Nueva Galia
En la localidad sureña cursan 24 jóvenes. En pocas semanas, muchos de ellos concluirán sus estudios secundarios. La mayoría anhela seguir estudiando una carrera terciaria o universitaria.
A más de 260 km de la capital provincial, 24 historias buscan reescribirse con el Plan 20/30. Se trata de jóvenes que encontraron en el plan educativo provincial una segunda oportunidad para convertirse en lo que siempre anhelaron. Elina sueña con ser escribana; Verónica, diseñadora de interiores; Yanina, policía, y Paula aspira a un trabajo mejor. Éstas son sus historias.
Elina Escudero (22) conoce todo el departamento Dupuy. Su mamá era maestra rural y, a medida que se trasladaba para cumplir su función, ella y sus cuatro hermanos iban rotando de escuela. De este modo, llegó a Bowen, Mendoza, donde comenzó el secundario. Por distintos motivos, nunca pudo terminarlo.
“Siempre quise seguir estudiando pero viajar a rendir era imposible. Gracias al Plan 20/30 tengo una nueva oportunidad”, relata la joven. Y añade: “Mi sueño es irme a vivir a Villa Mercedes para estudiar Escribanía. Ya tengo todo listo”.
Su compañera, Verónica Lucero (26), confiesa que no le fue fácil retomar el secundario. Aun así, enfrentó el desafío. “Me costó un poco, pero me adapté rápido”, asegura la alumna de la tercera etapa.
Verónica vive con su esposo y su hijo, Ángel (2). La vida familiar es todo para ella pero siempre deseó hacer algo por su futuro profesional. “Encontré esta oportunidad y volví. Quiero estudiar una carrera. Diseñar interiores es algo que me gustaría hacer”, reconoce.
Yanina Villaruel (20), en tanto, llegó a San Luis desde San Rafael, Mendoza, detrás de su amor. En unas vacaciones conoció a quien hoy es su marido, quien trabaja como leñador en la zona rural. Juntos tuvieron un hijo, Matías (2), quien se queda con su abuela para que Yanina termine el secundario. “El Plan 20/30 me dio motivos para terminar el secundario. Me gustaría estudiar para policía”, comenta.
En el caso de Paula Sosa (26), la esperanza está en encontrar un trabajo más estable. Hace más de cuatro años que trabaja en un hotel, pero lo hace por temporadas. Pasaron 10 años desde que pisó un aula por última vez.
Por tal motivo, siente que el Plan 20/30 es su oportunidad para volver a empezar. “Mi deseo es darle algo mejor a mis hijas”, explica. Y añade: “Si bien mi principal objetivo es encontrar un trabajo mejor, también me gustaría seguir estudiando alguna carrera”.
Nota: Melina Manzur – Prensa ULP
