Voto asistido
Pablo y Paula, dos ejemplos de conciencia democrática
Se denomina asistido al sufragio emitido por las personas que padecen discapacidad visual. Para ello, en cada establecimiento escolar se dispone de un cuarto accesible.
Pablo y Paula son no videntes y concurrieron a cumplir con su derechociudadano a la escuela Paula Domínguez de Bazán.
Ubicados en la fila de electores, esperaban su turno para votar. “Lo bueno es que contamos con un cuarto oscuro accesible para poder hacerlo”, dijo Pablo quien contó que, por lo general, lleva su voto preparado desde su casa pero que en esta oportunidad se olvidó y que iba a pedir asistencia al presidente de mesa para poder realizarlo. Teniendo en cuenta que el elector no vidente puede sufragar asistido por una persona de su confianza o por la autoridad de la mesa.
Cabe destacar que el proceso electoral prevé no sólo un cuarto oscuro accesible al que puede optar o no por utilizarlo para sufragar la persona no vidente, sino además que ese cuarto está preparado con portaboletas que tienen una etiqueta en relieve con el númerode cada lista, que le permite ubicar mediante el tacto la boleta que desea seleccionar.
Por su parte, Paula, que estaba junto a Pablo, coincidió en destacar la posibilidad de poder contar con un cuarto oscuro accesible y que también iba a pedir asistencia a la autoridad de mesa para que la acompañara para sufragar.
Respecto de participar del acto eleccionario, Pablo fue muy enérgico al decir: “todos tenemos que votar si podemos hacerlo. El que no lo hace y puede que se embrome porque después no tiene derecho a quejarse si no se comprometió como ciudadano”.
Nota: Viviana Antonucci
Fotos: Jésica Flandes
