Para chicos y grandes, literatura infantil
Por lo general, se considera la literatura infantil como aquella dirigida a los más chiquitos. Sin embargo, mejor es decir que es aquella que no excluye al adulto y que puede ser leída y comprendida, de manera más superficial, por niños.
Hacia los años ’40, los cuentos infantiles eran escritos por docentes y educadores. Por lo tanto, su contenido era pedagógico y estaba totalmente asociado a la escuela. Los cuentos debían contener una “enseñanza”.
Para la década del ’60, la literatura infantil comienza a dar un viraje, principalmente porque empieza a ser escrita desde la literatura. En Argentina se destacan autores como María Elena Walsh, Javier Villafañe, Laura Devetach, Elsa Bornemann, etc.
[youtube id=”6Th3CtYnWCM” titulo=”Canciones. Luis Pescetti – Yo leí Harry Potter y me gustó”]
Este tipo de literatura ya no se relaciona directamente con la escuela, sino que se asocia directamente al placer estético. Estos textos indagan sobre la condición humana y no pretenden dar respuestas, por el contrario, plantean nuevos interrogantes. En este sentido, los temas que trate serán todos: la amistad, el amor, la muerte, el divorcio, la confianza en sí, el poder de la imaginación, etc.
A modo de deleite, para todos los niños y niñas de cero a cien años, dos poesías. ¡Feliz Día del Niño!
Usted
Usted
que es una persona adulta
– y por lo tanto-
sensata, madura, razonable,
con una gran experiencia
y que sabe muchas cosas,
¿qué quiere ser cuando sea niño?
Jairo Aníbal Niño (escritor colombiano, 1941-2010)
En una cajita de fósforos
En una cajita de fósforos
se pueden guardar muchas cosas.
Un rayo de sol, por ejemplo
(pero hay que encerrarlo muy rápido,
si no, se lo come la sombra)
Un poco de copo de nieve,
quizá una moneda de luna,
botones del traje del viento,
y mucho, muchísimo más.
[youtube id=”u19mq0GxCGI” titulo=”Canciones.María Elena Walsh – Baguala de Juan Poquito “]
Les voy a contar un secreto.
En una cajita de fósforos
yo tengo guardada una lágrima,
y nadie, por suerte, la ve.
Es claro que ya no me sirve
Es cierto que está muy gastada.
Lo sé, pero qué voy a hacer,
tirarla me da mucha lástima
Tal vez las personas mayores
no entiendan jamás de tesoros
Basura, dirán, cachivaches
no sé por qué juntan todo esto.
No importa, que ustedes y yo
igual seguiremos guardando
palitos, pelusas, botones,
tachuelas, virutas de lápiz,
carozos, tapitas, papeles,
piolín, carreteles, trapitos,
hilachas, cascotes y bichos.
En una cajita de fósforos
se pueden guardar muchas cosas.
Las cosas no tienen mamá.
María Elena Walsh (escritora argentina, 1930-2011)