Remediaron basurales en tres localidades de la costa
Recibieron tratamiento los basurales municipales de Carpintería, Los Molles y Villa Larca. Realizaron estudios de suelo y efectuaron reparaciones en las zonas afectadas.
Esta acción es consecuencia directa de la puesta en funcionamiento de la Planta Regional de Reciclado El Jote, ya que estos son algunos de los municipios que ya transportan y procesan allí sus residuos domiciliarios.
Para devolver a los terrenos ocupados por los basurales las condiciones naturales previas se realizó, en primer término, el retiro y limpieza de la totalidad de los residuos de la zona afectada, a los cuales se les dio el tratamiento correspondiente.
Se realizaron estudios de suelo, al inicio y al final de los trabajos, se niveló el terreno, se lo descompactó, aró y se preparó la cama de siembra sobre el suelo afectado. El último paso fue la recomposición florística del bosque nativo y posteriormente, el cerramiento de la zona.
“La remediación de estos basurales es parte de los beneficios que implica la puesta en marcha de la Recicladora El Jote, la primera planta de estas características en la provincia. Ya que estos municipios comenzaron a separar sus residuos sólidos urbanos en origen y son trasladados a la planta para ser reciclados o disponerlos según corresponda. Los basurales a cielo abierto quedaron obsoletos y realizamos las tareas correspondientes para devolver a esos predios sus características anteriores de flora y fauna”, explicó la ministra Daiana Hissa.
Los basurales se encontraban, además, en zona de bosque nativo, lo cual incrementaba sus riesgos. “Es muy importante erradicar todos, pero fundamentalmente aquellos basurales que se encuentran rodeados de fauna autóctona porque se convierten en puntos de incendios, generando un sinfín de inconvenientes”, aclaró el jefe de Programa Gestión Ambiental, Luciano Andrade.
El Ministerio de Medio Ambiente ya había remediado tres basurales por encontrarse rodeados de bosque nativo, entre ellos, los municipios de Potrero de los Funes y El Volcán. “Remediar estos espacios es un arduo trabajo que no termina cuando el terreno está limpio y forestado, sino que implica que los vecinos tomen la conciencia necesaria para no volver a convertir ese predio en un depósito de residuos”, destacó la ministra.
