Después del injusto sufrimiento, Estudiantes se metió en la semifinal del Argentino “B”
Ganó por penales, tras un partido vibrante que en el tiempo reglamentario terminó 2 a 2. Jugó ante unas 5 mil personas que fueron testigos de una gran fiesta.
El equipo no se merecía ir a los penales y los hinchas no se merecían tanto sufrimiento. Ante unas 5 mil personas, Estudiantes celebró su pase a semifinales del Torneo Argentino “B”. Después de la actitud que demostró durante los 90 minutos, ilusiona más que nunca y ahora sí falta menos. Tenía que ganar como sea y lo hizo: la lotería de los penales se quedó en su casa y todo terminó en una gran fiesta.
Así fue que el local eliminó a Sportivo Rivadavia de Venado Tuerto luego de un partido lleno de nervios, adentro y afuera, que terminó 2 a 2 en el tiempo reglamentario. Nicolás Gatto no sólo fue protagonista porque se erró un penal en el primer tiempo, sino porque convirtió los dos golazos que le permitieron a su equipo llegar a los penales.
La primera etapa terminó 0 a 0 y con la protesta de los jugadores santafesinos que no le creyeron al árbitro la existencia del penal que cobró a los 46 minutos. Con la bronca, los 22 jugadores se fueron al vestuario para cambiar el aire.
En el complemento llegaron las emociones duplicadas. A los 17, Gatto se tomó revancha y con un soberbio derechazo puso el 1 a 0 y la primera alegría para el pueblo albiverde. Pero el festejo no duró demasiado porque dos minutos después llegó el empate con un disparo de larga distancia de Juan Lapietra.
Cuando faltaban 6 minutos para el final Gatto otra vez hizo delirar a su gente y le regaló el segundo gol, de chilena. Y cuando todos pensaban que la clasificación estaba asegurada, Maximiliano Prioreschi, en el último minuto del tiempo reglamentario, puso el empate para Rivadavia y sentenció la historia.
El 2 a 2 llevó a los equipos a lo más incierto del fútbol, la definición por penales. La efectividad y la jerarquía de los jugadores de Estudiantes, que convirtió los cuatro penales que ejecutó (Roberto Moreira Aldana, Facundo Quiroga, Daniel Quiroga y Mario Vallejo), y la mala puntería de los visitantes (que erraron 2 y convirtieron 1), pusieron al equipo de San Luis en la semifinal del Torneo. La serie quedó 4 a 1 para el local que ahora sueña más que nunca con un nuevo ascenso. Anoche hizo méritos y demostró por qué está entre los 12 mejores del Torneo. El festejo lo tiene merecido.