“Los dirigentes, la línea técnica y el equipo se convirtieron en algo explosivo”
Así recordó Alberto Rodríguez Saá aquella campaña que lideró como parte de la dirigencia del club. Un día como hoy en 1993, “El Lobo” vencía a Atenas en Córdoba y hacía historia.
Veinte años pasaron y el recuerdo sigue grabado en la retina de quienes fueron testigos, que a través de sus relatos lo trasmiten a las nuevas generaciones. El GEPU con un equipo conformado con Juan Espil como principal figura, Gustavo Ismael Fernández, Esteban Pérez, Sergio Dacuña, Fernando Allemandi, Elnes Bolling, Carl Amos, Roland Houston, Javier Medina, Rafael Costa, Leonardo Díaz, Martín Peinado y Héctor Minzer, vencía en el sexto partido a un poderoso Atenas liderado por Marcelo Milanesio y Héctor “El Pichi” Campana.
“El GEPU tuvo dos cosas que fueron revolucionarias -explica Rodríguez Saá en un dúplex realizado entre su programa Palneta Xilium y Agenda Directa de Canal 13- primero, la preparación física, que ahí se incorpora a Orlando Ferratto, eso fue determinante, fuimos los primeros que priorizamos la preparación física en la Liga Nacional”.
“Antes del GEPU, el preparador físico era el mismo técnico y hacían una preparación muy liviana”, explica Alberto.
La figura de Ferrato creció aún más cuando quedó solo al frente del plantel puntano, luego del alejamiento del técnico Antonio Manno tras una derrota de local en el Palacio de los Deportes “José María Gatica”, de Villa Mercedes. En aquella oportunidad, la caída por la fase regular ante quien sería su rival en la final, Atenas de Córdoba, le daba un importante cimbronazo al Lobo.
El ex gobernador marcó otra de las claves de aquel campeonato: “Lo segundo, fue comprender algo que revolucionó al básquet nacional, nosotros en la Argentina no tenemos la altura que tienen jugadores de otros países como en Estados Unidos, entonces nosotros hicimos el básquet de defensa, contragolpe y velocidad. Esto nos dio la milésima de segundo, si vos corres más rápido y hacés contragolpe no necesitas altura, y esto fue determinante en la Liga”.
Durante su relato, Alberto Rodríguez Saá no pasó por alto a nombres como el Zeta Rodríguez, primer técnico campeón de Liga Nacional del club, Hugo Hissa, quien luego fuera presidente de la institución, Saúl Bustos, manager del equipo campeón y a la Federación puntana, a quienes reconoció como pilares importantes en la gloria del GEPU.