Rechazaron la explotación de una mina de oro
Se trata del proyecto “Irene Rita”, en cercanías de La Carolina.
El Ministerio de Medio Ambiente rechazó el proyecto de aprovechamiento de la mina de oro Irene Rita, que afectaría una extensión de 3 mil hectáreas en las cercanías de La Carolina. La decisión se tomó por considerar que “la explotación y clasificación de oro produciría un daño irreversible al suelo”, según lo establece la resolución Nº 80 emitida por el Programa Gestión Ambiental.
“Si bien la empresa de capitales nacionales prometía una explotación sin utilización de químicos, el proyecto fue rechazado porque consideramos que es más importante preservar nuestras Sierras Centrales, protegidas por ley. No nos oponemos al progreso y al desarrollo de la provincia, siempre y cuando no se quiera entender por progreso un daño natural irreparable”, destacó la ministra Daiana Hissa.
Además de la protección de la riqueza natural de la zona, el Ministerio rechazó el estudio de impacto ambiental presentado por la empresa minera por encontrar imprecisiones y no cumplir con los requerimientos solicitados.
“Nuestra oposición a la minería aurífera es una política de estado, la misma que protege nuestros recursos naturales, fundamentalmente el agua, para cuidar la calidad de vida de los puntanos, los presentes y los futuros. Esto para este Gobierno es prioritario”, subrayó la ministra.
¿Cómo se realiza un estudio de impacto ambiental?
Los Estudios de Impacto Ambiental (EIA) comienzan con la presentación de un formulario (Solicitud de Categorización) por parte de la empresa al Ministerio. Con esto se define el nivel de complejidad ambiental del proyecto. Pueden surgir tres categorías: si pertenece a la primera, significa que tiene baja complejidad ambiental y no debe presentar EIA.
En este caso, el Ministerio de Medio Ambiente emite una constancia de categorización y un Certificado de Aptitud Ambiental. Si el proyecto, por su complejidad ambiental, pertenece a la segunda o tercera categoría, se debe presentar un estudio de impacto, en el caso de un emprendimiento nuevo o una auditoría ambiental, si se trata de una actividad prexistente.
Tanto los EIA como las auditorías deben ser elaboradas por profesionales matriculados en el Área Evaluación de Impactos Ambientales del Ministerio de Medio Ambiente.
Los profesionales del área realizan las inspecciones en las obras, observando que el detalle presentado en la solicitud de categorización sea preciso y completo. Una vez comprobados los datos aportados por las empresas, el procedimiento de evaluación culmina con la emisión de la Declaración de Impacto Ambiental, que puede aprobar la actividad o proyecto completamente, con observaciones o rechazarlo.
En el primer caso, se emite el Certificado de Aptitud Ambiental. En el segundo, se incluyen observaciones a cumplir en un plazo determinado. Si el estudio es rechazado, no se autoriza el desarrollo de la actividad. En el documento que lo rechaza se fundamentan detalladamente los motivos para que la empresa pueda realizar las modificaciones necesarias.
Ítems más importantes
Los profesionales que realizan los EIA deben tener en cuenta aspectos clave para el desarrollo de un emprendimiento:
1) Conveniencia de la instalación de cierto procedimiento en determinado lugar.
2) Conocer si el emprendimiento generará efluentes, si es así, qué proceso productivo afectará al ecosistema.
3) Una clara definición del área de influencia, que suele ser lo más difícil de establecer.
4) La descripción detallada del proyecto y sus potenciales ampliaciones.
5) Completo Plan de Manejo Ambiental, adecuado al proyecto y a las características del lugar de emplazamiento.
6) Establecer en qué medida hará uso de los recursos de la región.
7) Características de eficiencia energética y de ahorro de agua que deberá tener el proyecto.