En las Escuelas Inteligentes la robótica se aplica a todas las materias


Los chicos aprenden a resolver problemas, trabajan en grupo, estimulan la concentración y controlan la ansiedad.

Con la premisa de que la robótica sea una herramienta dentro de los núcleos prioritarios de aprendizajes,la Universidad de La Punta(ULP) implementa la iniciativa “Todos en la Robótica”. Por el momento, la propuesta se ejecuta en veinte Escuelas Inteligentes (EI) y enla Escuela PúblicaDigital (EPD) “Albert Einstein”, nivel primario. Pero se prevé llevar la propuesta todos los establecimientos educativos de la provincia.

El Parque Informático La Punta(PILP) dirige esta iniciativa desde el año. Para su desarrollo ha entregado kits de robótica para el armado de diferentes piezas y se capacitó a docentes mentores dela Universidad, quienes a su vez forman a sus colegas docentes de cada institución.

En referencia a la implementación de esta actividad, el director del PILP, Cristian Moleker, explicó que la robótica se emplea en el nivel primario, y que se aplica en cada asignatura para abordar contenidos en “modalidad de aula taller”. Según indicó los chicos conforman grupos de tres participantes y “se distribuyen roles”, que van rotando.

“Los docentes entienden que es otro recurso didáctico para abordar sus clases, desde temas abstractos como geometría y física hasta literatura, porque al construir algo se ven motivados a leer, a interpretar una consigna y a escribir un informe. El docente plantea un tema que tiene que ver con una problemática real y, en base a eso, le dan significado y se plantea una posible solución a través de la construcción de un elemento. Previo deben interpretar una consigna y escribir un informe”, detalló Moleker.

Asimismo, manifestó que desde el PILP se visita a las diferentes Escuelas Inteligentes para seguir de cerca su trabajo en la materia. “Estamos haciendo un recorrido por las escuelas, charlamos con los directores, docentes y mentores, ya que hay escuelas que avanzan bien y queremos aportarles mejoras. En los casos en que no está funcionando como queremos, necesitamos conocer sus problemas y buscar soluciones”, subrayó.

Esta modalidad de trabajo, no solo implica el desarrollo del interés de los chicos por las ciencias, sino que también les genera disciplina ya que para construir un objeto necesitan determinada atención. También aprenden a controlar la ansiedad ya que trabajan con una división de roles; esto implica que cada uno tenga una actividad determinada, y a su vez ayuda a los chicos más tímidos a desenvolverse en el ambiente.

El colegio “San Agustín” hace dos años firmó un convenio conla ULPy actualmente forma parte de las Escuelas Inteligentes. Daniel Gozainy, director del establecimiento, explicó que paulatinamente amplía la propuesta a los diferentes grados, y sostuvo que con la implementación del proyecto ha obtenido “resultados sorprendentes”. “Esto es un desafío, porque los docentes muchas veces tenemos prejuicios acerca de la implementación de este tipo de actividades. Pero hoy se está rompiendo con este prejuicio y comenzamos a darnos cuenta de que la robótica puede aplicarse de manera transversal en los espacios curriculares. Lo hemos comprobado”, concluyó el director.

La alumna Ana Valenzuela (9) manifestó que ya han tenido cuatro clases de robótica en el año y detalló que han armado un auto, un camión de bomberos, un robot y una balanza. “Para hacerlo buscamos las cajas con las piezas, entramos en la página que nos da la señorita y nos vamos fijando cómo se arma. Nos dan 40 minutos para hacerlo. A mí me tocó armar, así que el encargado del material me pasaba todo lo que necesitaba, después pasamos al frente y contamos qué nos costó más y qué nos costó menos, y en qué nos equivocamos”, narró la pequeña.

En tanto que Luna Cornejo (9) también contó su experiencia: “Me gusta la robótica porque es muy divertido atornillar y armar piezas. Algunas cosas son difíciles pero igual me gusta. Más adelante vamos a aprender a darle movilidad a lo que construimos con controles, sensores de luz y pilas”.

Asimismo, Ezequiel Tapia (9) demostró gran interés por seguir formándose en el tema y manifestó que “por ahora está aprendiendo a armar robots y autos para después aprender a hacerlos andar y moverse”.



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