ICONOS DE LA PUNTANIDAD
sábado, 21 agosto de 2021 | 10:16

Renca y los granaderos puntanos de la libertad americana

La ciudad ‘madre de ciudades’, fundada junto al Río Conlara, evoca en sus calles historias de hombres y mujeres que hicieron un enorme aporte a la gesta libertadora.

En el centro urbano de Renca se encuentra la plaza principal en homenaje a los soldados de estas tierras que participaron en las batallas por la independencia. Bancos de madera tallados con los nombres de Los Granaderos Puntanos y una gran fuente se destacan en este bellísimo ambiente pensado para el encuentro y el descanso. El paseo por aquí es uno de los más elegidos por los visitantes de la localidad.

En la parte sur, se encuentra el Valle de Conlara, rodeado por el cordón serrano del mismo nombre y las Sierras de los Comechingones. En este rincón sanluiseño, los visitantes contemplarán los más bellos paisajes y magníficas postales naturales. El espíritu de los granaderos Basilio Bustos, José Gregorio Franco y Januario Luna, que dieron su vida por la Patria en la Batalla de San Lorenzo, las memorias de José Santo Ortiz, y el espíritu del máximo héroe de San Luis, Juan Pascual Pringles; son algunas de las historias que hacen al acervo cultural de Renca.

Esta localidad allá por 1810 era la ciudad más importante de la provincia y una de las más relevantes de Cuyo. Los habitantes de esta región dieron todo por la Guerra de la Independencia, lugar al que llegaban desde las sierras de San Martín, del norte y los Comechingones. El busto del héroe puntano Coronel Juan Pascual Pringles, legendario granadero puntano evoca el gesto glorioso de los granaderos de Renca, su pueblo, a las valientes mujeres puntanas y un mausoleo guarda los restos del gobernador, José Santos Ortiz, y su esposa Inés Vélez Sarsfield.

Casa Natal de José Santos Ortiz: La antigua casona que vio nacer y crecer a don José (primer gobernador de la provincia de San Luís) se emplaza sobre una de las esquinas de la plaza principal. La propiedad reviste un significativo valor histórico para nuestro país, ya que allí se firmó el pacto de reorganización federal y se establecieron las bases de administración de la provincia.

Mausoleo de José Santos Ortiz: El monumento donde yacen los restos de José Santos Ortiz y de su esposa Inés Vélez Sarsfield, fue inaugurado en el 2010.

Iglesia de Nuestro Señor de Renca:  Se ubica frente a la Plaza de Los Granaderos Puntanos. Este templo es considerado uno de los más antiguos de San Luís, fue construido en el año 1732 por una comunidad de jesuitas provenientes de Chile. Entre las imágenes que resguarda se encuentra la del Cristo del Espino, salvada de los enfrentamientos con las tribus ranqueles que intentaban ocupar el territorio. La Capilla de Nuestro Señor de Renca es un símbolo de la fuerte devoción de los habitantes de la región.

Dique San Felipe: Sobre el Río Conlara, en la década del ’50, se construyó este imponente dique que se encuentra a 8 Km. de Renca.

Piedra Pintada: Transitando 4 km por la Ruta Provincial Nº 40 y siguiendo el curso del río Conlara, se ingresa a un campo particular, después del cual se accede caminando hasta donde se encuentran los rastros de uno de los últimos asentamientos aborígenes. Sobre el llano escenario de una piedra de granito pueden descubrirse varias pinturas rupestres pertenecientes a la cultura michilingüe.

El Tambito de Renca: en el lugar se pueden conocer las labores cotidianas de campo. Se accede al establecimiento rural tras tomar un desvío que presenta la Ruta Provincial Nº 40.

Teléfono mudo: Se trata de una piedra en el camino, a 4 Km. de Renca. Se llega transitando por un trayecto irregular en el que se encuentra una gran piedra con forma de huevo. Denominada así por la pérdida de un celular que jamás pudo recuperarse por la falta de señal.

El Diquecito: por la orilla del río Conlara se puede llegar a este pequeño embalse de veinte metros de ancho y seis de altura que forma un espejo de agua de escasas dimensiones, pero de gran belleza paisajística.

Nota y fotos: Prensa Secretaría de Turismo.