EL AVE APARECIÓ EN LUJÁN
miércoles, 21 octubre de 2015 | 13:35

Rescataron un águila coronada malherida, no sobrevivió a la cirugía

En Luján, una familia encontró un águila coronada en muy mal estado que llevó en busca de ayuda al Área Natural Protegida Quebrada de las Higueritas, la más cercana. El ave fue inmediatamente trasladada desde allí al Centro de Conservación de Vida Silvestre en La Florida, donde luego de otorgarle los primeros auxilios y determinar tipo y gravedad de las heridas, contactaron al Programa de Conservación y Rescate de Aves Rapaces, quienes iban a operarla. El ave llegó a Buenos Aires, pero no resistió la anestesia y murió en la mesa de operaciones.

El Águila Coronada se encuentra en peligro de extinción, quedan entre 500 y 1200 ejemplares en todo el mundo.

El águila coronada se encuentra en peligro de extinción, quedan entre 500 y 1200 ejemplares en todo el mundo.

“El procedimiento se realizó correctamente: la familia que la halló la trasladó al Área Natural Quebrada de las Higueritas donde los guardaparques la revisaron y avisaron al Centro de Conservación. Allí nuestro veterinario especializado en fauna silvestre, Agustín González, hizo el chequeo y diagnóstico; era un ejemplar juvenil con un cuadro de deshidratación grave, fractura de radio y osteomielitis, es decir, una infección en la médula del hueso a partir de una fractura expuesta. Con este panorama nos comunicamos, a partir de un convenio que mantiene el Ministerio, con el Programa de Conservación y Rescate de Aves Rapaces para enviar el ave a Buenos Aires, donde la operarían. Lamentablemente el ave murió antes de comenzar la cirugía”, detalló el jefe del Programa Biodiversidad, Jorge Heider.

En Buenos Aires el equipo que la iba a operar constató el diagnóstico y profundizó en el estado de salud del ave: “Presentaba un ala fracturada con una herida que comprometía gravemente la articulación del carpo. También tenía una pata afectada a tal punto de no poder usar su garra por el edema causado por estar atada con una cadena”, informaron. El ave no resistió la anestesia y murió antes de la cirugía.

“Es mucho, pero también necesario, el trabajo que tantos profesionales y técnicos comprometidos realizan para tratar de salvar a cada ejemplar de águila coronada, ya que según categorización internacional se encuentra en peligro de extinción, sólo quedan entre 500 y 1200 ejemplares en todo el mundo. La pérdida de uno sólo es una gran tristeza, porque conlleva un enorme daño ambiental”, destacó la ministra de Medio Ambiente, Daiana Hissa.

Plan Nacional de Conservación del Águila Coronada 

San Luis es adherente al Plan Nacional de Conservación del Águila Coronada, una estrategia de cooperación desarrollada por organismos provinciales y diversas ONG, que tiene como objetivo la protección y recuperación de la especie.

En 2013, el Ministerio de Medio Ambiente creó un Centro Regional para Águilas Coronadas en Tránsito, (CRACT) que funciona en el Centro de Conservación de Vida Silvestre de La Florida con el objetivo de completar la rehabilitación física y conductual de las ejemplares recuperados.

La importancia del CRACT radica en la disponibilidad de una jaula voladora de 33 metros de largo, 17 metros de ancho y 20 metros de alto. “Las dimensiones de la jaula permiten a las águilas completar la última etapa de recuperación previa a la liberación, fortaleciendo su musculatura mediante vuelos cortos. Además, este espacio favorece la familiarización de los animales con el ambiente donde serán liberados, ya que posee vegetación natural típica de los ambientes donde habita la especie”, explicó el responsable del Centro de Conservación, Matías Ayarragaray.

En el año 2013, Puntana, un águila coronada rehabilitada, fue liberada en Quebracho de la Legua. En 2014, otras dos coronadas rehabilitadas en el CRACT fueron devueltas a sus ambientes de origen, en San Juan y Mendoza.

 

Nota: Paula Kraliczek – Prensa Ministerio de Medio Ambiente.

Fotos: Programa de Conservación y Rescate de Aves Rapaces.

Corrección: Berenice Tello.

Contenidista: Fernando Romero.