SOLIDARIDAD Y BIENESTAR
sábado, 01 agosto de 2015 | 11:18

Reír para sanar

Payasos de hospital, clown itinerantes, un payamédico y una líder de yoga de la risa explican el aporte de disciplinas complementarias basadas en la solidaridad y el bienestar.

 Mauro Estravis y Juan Gutiérrez son jóvenes estudiantes de Medicina, desde hace tres meses brindan servicios en el Hospital Regional “Juan Domingo Perón”.


Mauro Estravis y Juan Gutiérrez son jóvenes estudiantes de Medicina, desde hace tres meses brindan servicios en el Hospital Regional “Juan Domingo Perón”.

Mauro Estravis y Juan Gutiérrez son jóvenes estudiantes de medicina, almas viajeras en bicicleta que exploran las realidades socioculturales del territorio argentino. Desde hace tres meses brindan servicios en el Hospital Regional “Juan Domingo Perón” de Villa Mercedes. “Consideramos que la emoción está ligada a los procesos de salud y enfermedad, buscamos distender al personal médico y al paciente”, comentó Mauro, futuro pediatra.

Ambos son amigos, se conocieron en los pasillos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, “en el devenir de nuestra formación médica hemos decido recorrer el país para conocer las distintas realidades sociosanitarias”, sostuvo Estravis, quien además agregó: “Nosotros pertenecemos a la agrupación ‘Salud a Pedal’ y articulamos actividades con ‘Puenteclown’, comunidad que realiza intervenciones en centros de salud y en hospitales, en la actualidad somos payasos itinirantes, a medida que viajamos visitamos distintos centros asistenciales”.

“Puenteclown” es una modalidad artístico asistencial, una comunidad que tiene como misión generar vitalidad y alegría en situaciones de vulnerabilidad individual y social, “acompañamos desde el humor y los recursos artísticos a los equipos de intervención comunitaria en sus acciones humanitarias”, destacó Juan, estudiante de salud mental, quien también resaltó que comenzaron esta aventura en el norte de Santiago del Estero, “cruzamos las provincias de Catamarca, Córdoba y ahora en San Luis, donde rotamos nuestras especialidades médicas”. La comunidad tiene como función trabajar terapéuticamente desde la risa, “nosotros consideramos que existe la risoterapia” mencionó.

Acerca del presente, Mauro Estravis explicó: “Observamos un crecimiento del clown de hospital y de todo lo que tenga que ver con juegos, de hecho hay una nueva ley que obligará a que los hospitales tengan un equipo de payasos de hospital en las terapias intensivas pediátricas”.

Desde “Puenteclown” y “Salud a Pedal” buscan el estímulo y la contención de familias. La técnica de payasos de hospital surgió en Estados Unidos, en 1980, donde desde un circo de la ciudad de Nueva York decidieron realizar intervenciones en hospitales y después se popularizó con la película “Patch Adams” que protagonizó el recordado Robin Williams, “en la actualidad encontramos diferentes agrupaciones en nuestro país como ‘Puenteclown’, ‘Alegría Intensiva’ y ‘Payamédicos’, cada una con su mecanismo de trabajo pero con un solo objetivo: ayudar al prójimo”, resaltó Mauro.

Para cada intervención los voluntarios se preparan de una manera especial, “debemos saber qué edad tienen los pacientes, cuál es la enfermedad y luego de cada intervención, como mecanismo de contención de uno mismo, escribimos en un cuaderno de bitácoras donde narramos lo que se fue viviendo con cada paciente, buscamos realizar catarsis de la situación” manifestó Mauro, “la experiencia la compartimos con el grupo y cada 15 días nos reunimos con psicólogos especializados para que nos brinden contención”, remarcó.

En dos semanas emprenderán un nuevo viaje, otra aventura, “finalizada nuestra estadía en Villa Mercedes partiremos hacia las provincias de San Juan y Mendoza, y luego el sur del país”, indicó Juan Gutierrez, quien además agregó que “una risa influye en el estado del paciente, todos pueden ser payasos de hospital, no es necesario ser estudiante de Medicina, sólo hay que tener la intención y las ganas de involucrarse”.

“Puenteclown” es una modalidad artístico asistencial, una comunidad que tiene como misión generar vitalidad y alegría en situaciones de vulnerabilidad individual y social.

“Puenteclown” es una modalidad artístico asistencial, una comunidad que tiene como misión generar vitalidad y alegría en situaciones de vulnerabilidad individual y social.

“Payamédicos”

“Payamédicos” es una asociación civil cuyo objetivo es “contribuir al proceso de recuperación del paciente hospitalizado, tratando de desdramatizar el medio hospitalario a través de una terapia complementaria basada en el contacto lúdico con los pacientes”, explican en la web. Por Facebook informan dónde se dictan los cursos. En Argentina hay cerca de 4000 payamédicos. Cristian Velázquez es actor, director, docente teatral, payamédico y formador itinerante. Ha dictado talleres y capacitaciones en distintas ciudades del país.

-¿Por qué eligió ser payamédico?

-En el año 2007 me habían llamado del Hospital de Niños de Resistencia, Chaco, para que me encargara de la formación de un grupo de médicos de la risa, yo solo conocía la película de Robín Williams, investigando encontré que existían “Los Payamédicos”, una agrupación creada en 2002 por un médico psiquiatra argentino, el Dr. José Pellucchi, con una metodología propia y fundamentos teóricos muy contundentes. Luego de un intercambio de información por mail con el Dr. Pellucchi me inscribí en el curso de formación de Payamédicos. Yo vivo en la provincia de Corrientes, así que viajé a CABA, me formé como payamédico y luego como formador y volví al Hospital para formar el grupo fundacional “Payamédicos Resistencia”. Allí comencé, y sigo eligiendo hasta hoy a “Payamédicos” casi como una forma de vida.

-¿Cómo hace para convivir con las responsabilidades de la vida diaria y esta vocación por curar mediante la risa?

-Tengo la gracia de que mis responsabilidades sean estar conmigo, con mi familia, con mis amigos y tener tiempo para dedicarme a “Payamédicos”, ya que estoy todo el tiempo viajando por el país, llevando la formación especialmente en lugares donde la persona que no podría ir a CABA a estudiar pueda tenerlo en su propio lugar. La alegría que vivo en cada uno de esos encuentros me llena de energía beneficiosa a cada instante.

-¿Los payamédicos tienen un código de ética?

-Sí, es la payaética. Y esa payaética es muy secrética. Así discúlpeme la escuetidad.

-Desde que comenzó como payamédico, ¿cuántos cambios hubo en el resto de su vida?

-!Ja! La aparición de “Payamédicos” en mi vida coincidió con el inicio del cumplimiento de todos mis sueños. Por ejemplo, hacía tiempo que deseaba encontrar la unión entre arte y salud y la encontré en “Payamédicos”. De ahí en más, salí a viajar por el país para formar grupos y conocer, y hacer amigos y compartir alegría y amor con personas de distintas regiones del país. Sobre todo el aprendizaje por cada alumno de cada curso que doy.

-¿Contra qué perjuicios se enfrentan como payamédicos?

-Absolutamente ninguno.

-¿Recuerda qué sintió la primera vez que un niño hospitalizado le devolvió una sonrisa?

-Sí, recuerdo. Fue la certeza de que eso era lo que siempre busqué y que lo había encontrado. Así que me dediqué de lleno a la actividad de payamédicos.

-¿Cualquier voluntario puede ser payamédico?

-Sí. Para poder practicar la Payamedicina, cualquier persona interesada que tenga más de 18 años y secundario completo, puede inscribirse en un curso de formación donde tendrá talleres de Payateatralidad y clases de Payamedicina, además de la Payaresidencia, para luego payarecibir el payacertificado que lo habilita a ejercer como payamédico en cualquier ciudad donde exista un grupo de Payamédicos.

-¿Cuál es su referente a nivel nacional para creer en el poder de la risa?

-El Dr. Jose Luis Pellucci. Si se refiere en el ámbito artístico, son muchos afortunadamente, en este momento Diego Capussoto; y también Les Luthiers y más allá en en el tiempo: Pepe Biondi

-¿Hay un nuevo sentido de la política en este movimiento?

-Desde que yo ingresé a “Payamédicos” hasta la fecha todas las políticas han sido beneficiosas para “Payamédicos”. Tal vez ese sea el nuevo sentido de la política.

-¿Cree que esta cultura de la ayuda organizada se está afianzando en el país?

-Bueno estoy de acuerdo con todo lo que sea ayuda, ya que es un sentimiento que todos tenemos en mayor o menor medida. Si esa ayuda está organizada mucho mejor, así llega a quien se lo merece. Si eso se afianza en el país, pues bienvenido sea.

-¿Hay distintos tipos de risa o todas sirven para curar?

-Siempre que usted se ría, de verdad, por lo que vivencia en ese momento, se asegurará de que más sano estará. Todas las risas sirven, si son verdaderas, más, ya que entre otras cosas liberamos endorfinas, que nos provocarán ese estado de bienestar y mejor oxigenación de la sangre, y muchos otros beneficios que tiene el acto de reírse.

Cristian Velázquez es actor, director, docente teatral, payamédico y formador itinerante. Ha dictado talleres y capacitaciones en distintas ciudades del país.

Cristian Velázquez es actor, director, docente teatral, payamédico y formador itinerante. Ha dictado talleres y capacitaciones en distintas ciudades del país.

Yoga de la risa

“Quiero aclarar algunos puntos: la risa es beneficiosa para la salud y la calidad de vida, como lo son los hábitos de vida saludables. No es curativa”, subraya Alicia Martínez, maestra internacional de yoga de la risa, desde septiembre de 2009.

“Yoga de la risa es una combinación de respiración profunda y ejercicios de risa. No es necesario contar chistes o hacer comedia. Se practica en grupo, con actitud juguetona y contacto visual entre los participantes; entonces la risa fluye genuina. Fue creada por un médico tradicional de la India, el Dr. Madan Kataria, en colaboración con su esposa Madhuri. En el año 1995 comenzó en un parque público en Mumbay, India, con 5 personas. Actualmente hay 60.000 clubes de la risa en 60 países”, asegura en su blog. Algunos ejercicios de Kataria y otros seguidores pueden encontrarse en Youtube. En Amazon está disponible su libro “Ríe sin razón”, donde fundamenta: “La razón para esto es debido a que las personas están recibiendo enormes beneficios a su salud. Mantener una buena salud es el mayor reto en este mundo moderno de grandes presiones y alta tensión. Casi un 70 a 80 por ciento de las enfermedades son debido al estrés y hoy en día la enfermedad cardiovascular, la depresión y el cáncer son las causas principales de muerte”. El contagioso mantra de esta disciplina es jo, jo, ja, ja.

“Me entrené con el Dr. Kataria, fundador del movimiento, el cual no es político ni religioso. Fui la primera en Argentina. El entrenamiento me habilita para formar a líderes en yoga de la risa. Puedo decir que a la fecha son 21 los líderes en yoga de la risa que he entrenado. Algunos de Capital Federal, otros de la provincia de Buenos Aires y un par de Uruguay y Paraguay. Sé que actualmente hay otros maestros de yoga de la risa en el país, pero no dispongo de más detalles. Mi único referente es Madan Kataria”, indica.

“La diferencia con otras disciplinas es que en el yoga de la risa una genera su propia risa a partir de hechos cotidianos, valores. No depende de chistes o actuaciones, por lo tanto es fácil y accesible a tod@s. Pero lo más importante es que se produce un cambio de actitud interno, con la práctica, claro está, que orienta nuestras vivencias hacia lo positivo. Y justamente por esta sencillez de la que hablo, la hace aplicable en cualquier momento y lugar”, escribe por mail.

Al referirse al presente de la disciplina, detalla Martínez: “No he encontrado muchas personas abiertas a esto de reír sin razón (aparente). Por lo tanto solo entreno líderes o preparo un taller a demanda”.

El libro de Kataria plantea: “Reír sin razón es el concepto y filosofía que sustenta todos los métodos de yoga de la risa. Al implementar esta filosofía se pueden aclarar muchos mitos y concepciones erróneas sobre la risa. Por ejemplo: ¿Como puedes reír sin ganas? ¿Como puedes reír si no eres feliz? ¿Necesitamos sentido del humor para reír? ¿Por que los niños ríen tanto y los adultos tan poco?”.

Para Alicia, el entrenamiento significó un cambio interno importante, que se visualiza con más risas en cualquiera de sus actividades. “Y la risa se puede practicar sol@s, lo cual mantiene el bienestar”, afirma.

 

Nota: Darío Barroso – Matías Gómez.

Foto: Douglas Cabrera – “Puenteclown” – Gentileza.

Corrección y contenidista: Berenice Tello.