Martín, Sergio, Francisco, Franco, Matías y la experiencia de estudiar un oficio

A partir del modelo de enseñanza que promueve la Universidad Provincial de Oficios (UPrO) desde el 7 de mayo, se palpita una nueva vida académica en la ciudad de Villa Mercedes. En el aula magna los alumnos en  las distintas especialidades que se dictan en el marco de la carrera de Ingeniería en Manteamiento, ponen de manifiesto su interés por aprender.

Martín (26), Sergio (33), Francisco (35), son compañeros de trabajo y además coincidieron en la elección de su cursada.

Cada día que se abre el emblemático portón, nuevos testimonios de vida se escriben en las páginas de la UPrO, que se conjugan con la ansiedad de ser parte de algo novedoso y a la vez con el sueño de  alcanzar metas personales.

Así lo definen en sus palabras los alumnos que de a poco van mimetizándose con la identidad institucional y haciendo de la experiencia de estudiar un oficio, la posibilidad de profesionalizar las habilidades.

Martín (26), Sergio (33), Francisco (35), son compañeros de trabajo en una empresa villamercedina y además coincidieron en la elección de cursar en primera instancia la formación inicial de asistentes de electricistas.

Esperando que comience la clase de informática, Sergio asevera mirando la cámara fotográfica que los captura: “Hoy en día sin computación no se puede manejar nada”. En tanto un poco más expectante Martín agrega: “estamos esperando que arranque, a mí me cuesta pero hay que ponerle ganas”, buscando el asentimiento de su compañero, Francisco quien manifestó que “es una buena oportunidad la que nos están ofreciendo y tenemos que aprovecharla”.

Los tres se inscribieron en asistente electricista para poder fortalecer sus tareas diarias, y  con ese anhelo de seguir creciendo, compartieron su sueño de poder desempeñar también el oficio de forma independiente – y a pesar del tiempo que les queda entre la vida personal y el trabajo- llegar a recibirse de ingenieros en mantenimiento.

En la misma fila de asientos en el aula magna previo a iniciar la clase de informática, se encontraban más tímidos Franco (18) y Matías (20). Se inscribieron para formarse como asistentes en mecánica.

Para Franco la universidad provincial de oficios fue la elección que directamente realizó al finalizar sus estudios secundarios. “Lo ideal es poder tener una carrera, y estudiar un oficio que me lo permita me pareció que debía animarme, porque me gusta la mecánica”, opinó. Matías contó que de la UPrO se enteró vía internet y “dejé el trabajo que estaba realizando para ponerme con todo a estudiar”, dijo al tiempo de expresar que su idea es poder terminar todos los niveles.

Los cinco jóvenes son ejemplo de los 500 testimonios que naturalmente ya forman parte de la comunidad educativa de la UPrO en las tecnicaturas que conforman la carrera de Ingeniería en Mantenimiento. Que según el sentir común,  “proyectan las ganas de progresar a partir de las bondades de la oferta educativa, que les ha venido a brindar la Universidad de Oficios en sus vidas”.

Nota y foto: Viviana Antonucci – Comunicación de la UPrO.

Contenidista: Emilce Martínez.