Una fábrica abandonada se convirtió en un barrio

La entrega de 80 nuevas viviendas en la ciudad de San Luis, correspondientes a los planes Progreso y Sueños, significó una alegría doble para el Estado provincial, ya que no solo significó cumplir el sueño a 346 personas, sino también propiciar la recuperación de un predio que, por muchos años, estuvo abandonado y usurpado.

Una fábrica abandonada se convirtió en un barrio.

Donde hoy lucen impecables las nuevas edificaciones, sobre calle Quines entre Riobamba y Catamarca, hace un año atrás estaba en pie y abandonado el ex Frigorífico San Carlos. “Este lugar que era un caldo de cultivo para la insalubridad y la inseguridad. Lo hemos transformado en un barrio que deben disfrutar y por eso nuestra felicidad es doble”, dijo el gobernador de la Provincia, CPN Claudio Poggi, durante el acto que se realizó en la mañana de este jueves y donde se entregaron las llaves a los propietarios.

Luego de que en abril de 2013, el gobernador anunciara en la Legislatura provincial, la expropiación del ex Frigorífico, comenzó el operativo de recuperación de limpieza por intermedio del Ministerio de Inclusión Social. Se iluminó, se aseguró el edificio y se dio contención social a las 18 familias que ahí habitaban.

Desde entonces, la recuperación de terrenos abandonados, llenos de escombros, basura e inseguridad, acompañó la política habitacional de los últimos dos años, con el fin de encontrarles una utilidad social y ofrecer una mejor calidad de vida a los sanluiseños. El primer resultado se consiguió en la ex Cerámica San José, donde se construyó un parque, el cual hoy disfruta toda la comunidad de la zona oeste.

Con la misma intención, avanzan proyectos en el predio de la exyesera de calle Fuerza Aérea, donde se construye un hospital (que contará con seis consultorios, salas de rayos X, de urgencias y de vacunación; además de laboratorio, farmacia, SUM y su respectivo estacionamiento); y la ex Fábrica SCAC (situado al frente) donde hoy avanza la edificación de viviendas bioclimáticas y un centro cultural. Este predio, que supera las cuatro hectáreas de superficie, se encontraba abandonado desde hace más de 20 años. Allí se edifican 33 hogares destinados a las familias judiciales puntanas y, además, la Escuela de Samba Industria Cultural “Sierras Del Carnaval”. En el mismo terreno se abrirá la continuación de la Avenida Centenario, que conectará las avenidas Justo Daract y Fuerza Aérea.