miércoles, 01 mayo de 2013 | 21:34
Platos para todos los gustos en Villa de la Quebrada
Para muchos, arribar a Villa de la Quebrada significa cumplir con una promesa o agradecer por lo recibido, pero también es disfrutar de la gastronomía local que espera a los peregrinos con platos para todos los gustos.
Las parrillas instaladas a lo largo de las calles principales, los puestos de venta de panchos y choripanes, los carritos que generan tentación con churros rellenos y las ventas de comidas caseras son algunas de las opciones gastronómicas.
Los visitantes llegan a Villa de la Quebrada por una horas eligen las comidas rápidas, en cambio, los que pernoctan en el lugar optan por comidas más elaboradas.
“Somos de San Luis y todos los años venimos a vender los churros. Es una tradición para nosotros y nos ayuda en lo económico”, dijo Estela una de las vendedoras que, a metros de la Iglesia, ofrece los tradicionales churros rellenos con dulce de leche.