Aunque ha incursionado en múltiples géneros, Sergio Muriel tiene el jazz a flor de piel. Ama improvisar. Incluso, fuera del piano, la calidez que transmite cuando enseña es el resultado de un oído atento, místico y espontáneo. Su viaje creativo inició hace más de siete décadas cuando se animó a explorar sonoridades y latitudes. Hoy es un faro en la cultura puntana.

CULTURA
domingo, 17 abril de 2016 | 21:14

Muriel y González, con el jazz a flor de piel

Aunque tocan múltiples géneros y nacieron en otras ciudades, a los dos temprano los deslumbró la improvisación. Hace años que colorean las calles y espacios de San Luis. Los ingredientes para una buena canción, en esta entrevista.