La reglamentación de la ley prevé graves sanciones como la retención de licencia de conducir y del vehículo, inhabilitación para el conductor que según la graduación alcohólica puede variar de 1 a 12 meses, así como sanciones pecuniarias que van desde los 300 hasta 3000 UF, teniéndose presente que cada unidad equivale a un litro de nafta especial de mayor octanaje.