Emoción, alegría y agradecimientos en la inauguración del edificio propio de la escuela GEA

Que cinco años en la vida de una institución puedan parecer pocos es relativo, y de eso puede dar fe la comunidad de la Escuela Generativa Ecológica Ambiental (GEA) de Villa Mercedes, que al inaugurar su edificio propio este jueves por la tarde, hizo un balance del largo camino recorrido en su primer lustro.

En realidad, esta propuesta educativa comenzó en 2015 bajo la forma de un proyecto, en el marco de la implementación de la entonces nueva modalidad de establecimientos generativos. Las actuales coordinadoras, Laura Condorí y Érica Bustos, se atrevieron a aventurarse en la creación desde cero de una escuela fuera del concepto convencional.

En aquellos albores, se fueron sumando otros docentes, sucedieron reuniones con autoridades provinciales y así fue cómo la idea se convirtió en un prolijo y detallado plan. Casi tres años después, la GEA abría sus puertas en las instalaciones recreativas del gremio SMATA, en Montevideo y Chacabuco.

Entre la teoría y la práctica, se encuentran varios imprevistos propios de la realidad, y en esta historia los hubo, pero el propósito de educar a niños y adolescentes con un interés sobre el medio ambiente ya tenía su propia inercia.

Por diversos motivos, en 2017, docentes, no docentes y el alumnado afrontaron su primera mudanza. Ese destino fue un moderno edificio ubicado en el extremo este de calle Maipú, conviviendo con la comunidad educativa de la escuela “Río Quinto”.

En este cambio se dio un fenómeno digno de destacar, pues a pesar de que entre la primera y la segunda locación se encuentran en puntos casi extremos de la ciudad, la gran mayoría de las familias se las apañó para que sus hijos continuaran asistiendo a la institución.

Ese voto de confianza se repitió en esta segunda (y última) mudanza, ya que el flamante edificio inaugurado este jueves queda en el extremo sur, bastante alejado para muchos alumnos, lo que para sus padres no parece representar inconveniente alguno. Emocionada, Laura Condorí remarcó ese detalle en su discurso, mencionando a muchas de las familias que siguen a la entidad desde su creación hasta hoy.

“Mi hijo egresó en la primera colación, pero tengo otros chicos cursando actualmente y no me importa tener que cruzar toda la ciudad para traerlos, porque confío en la escuela y en su equipo de trabajo”, dijo una madre invitada a brindar unas palabras en el acto, acompañada por la tácita aprobación de los demás tutores.

La ceremonia en sí tuvo su lado solemne, como el corte de cintas en el ingreso principal, la firma del acta inaugural para el Libro de Oro de la escuela y la entonación del Himno Nacional Argentino, junto a los abanderados y escoltas de las banderas nacional e institucional.

A ello le siguió una parte emotiva, que incluyó una serie de discursos de la que participaron egresados, actuales alumnos, docentes y autoridades especiales, como funcionarios de los ministerios de Educación y de Obras Públicas e Infraestructura. Estos últimos detallaron las prestaciones del moderno edificio, erigido en pleno barrio 365 Viviendas, cuyo diseño acompaña al innovador formato de enseñanza de la GEA, una de las primeras generativas de Villa Mercedes.

Como corolario, solo agregar que cinco años pueden parecer pocos, pero para esta escuela significan mucha historia, a la que, sin dudas, le deparan muchos hitos, como finalmente poder culminar un ciclo lectivo en su casa propia y esperar al 2024 con grandes expectativas y nuevas ilusiones.