ÍCONO DEL DEPORTE SANLUISEÑO
jueves, 02 agosto de 2018 | 18:44

José María Gatica, “el mito silencioso”

Marcelo Parisi Flores se expresa de manera muy sencilla y directa hacia la imagen del “Mono Gatica” en su nuevo libro, uno de los 19 publicados en su historial como escritor. “Gatica es y será, para toda la eternidad, un mito dentro del mundo boxístico y social”, destacó Parisi. 

En las líneas de su libro se pinta de puño y letra cómo un fiel representante de la militancia peronista cae en el ostracismo total, tras el golpe de 1955 que derroca al gobierno de Juan Domingo Perón, no sólo en el aspecto deportivo, sino también en lo personal, que lo deja a la deriva de las miserias de la vida.

“La obra hace un paralelismo entre la vida de un boxeador rudo y fuerte, donde la misma vida le da una bofetada y lo pone en la triste realidad que le tocó vivir y del cual, nunca se pudo escapar”, destacó el autor.

“Lo que más podemos rescatar es que ya hace más de 5 años que fueron repatriados los restos del Mono. No hay que olvidarlo y este trabajo representa el objetivo de no olvidarlo. Represento a miles de militantes del peronismo en una dura etapa que le tocó vivir a nuestro país”, agregó.

La confección del libro llevó un largo tiempo de análisis e investigación, para llegar a la impresión en noviembre de 2017: “Para cerrar esta conversación quiero decir que el Mono, el Tigre, jamás será olvidado, a pesar de que mucha gente sólo se acuerda de aquellas peleas épicas en el Luna Park frente a Alfredo Prada, quien fuera su rival en el cuadrilátero y su amigo fuera del mismo”.
El mercedino que emigró a la gran urbe desde muy niño junto a su familia observó la vida sentado en su cajón de lustrador de zapatos, y desde esa perspectiva le fue dando forma a su vida, hasta que por la bravura de pelear en la calle le vieron condiciones para subirlo a un cuadrilátero.
Desde el mismo momento que inicia esta actividad, con un récord de 85 triunfos en el campo amateur, salta al profesionalismo, donde tuvo la oportunidad en pleno gobierno peronista de ser el Tigre o El Mono. Depende de quién lo estaba observando, ya era una de las banderas del peronismo, sentado en el ring side o en la popular.


Supo conocer la gloria y las riquezas, pero su verdadera identidad estaba con los suyos, con los más necesitados, los que la pelearon desde abajo, y a pesar de haber pisado el mismísimo Madison Square Garden en Nueva York, nunca supo en verdad dónde debía estar, pero sí en su Villa Mercedes natal o en la gran capital.

 

Nota y foto: Prensa Programa Deportes.