FESTIVIDADES RELIGIOSAS
domingo, 03 mayo de 2015 | 19:40

Poggi  participó de la multitudinaria procesión del Cristo de la Quebrada

La multitud que asistió mezcló sorpresa y emoción cuando, antes de las palabras del obispo Pedro Martínez, uno de los sacerdotes leyó una carta que había enviado nada más y nada menos que Francisco desde El Vaticano. “Me uno espiritualmente a la celebración”, decía la misiva que fue aplaudida por los miles de fieles. En ella también pedía que rezaran por él. El gobernador de la Provincia, CPN Claudio Poggi fue parte como todos los años de la ceremonia que reunió a miles de fieles que llegaron de todo el país.

Claudio Poggi acompañado por su esposa, Sandra Correa, participó de la ceremonia que le puso el final a los tres días de celebraciones religiosas

Claudio Poggi acompañado por su esposa, Sandra Correa, participó de la ceremonia que le puso el final a los tres días de celebraciones religiosas

El primer mandatario asistió a la localidad acompañado por su esposa, Sandra Correa, para participar de la ceremonia que le puso el final a los tres días de celebraciones religiosas. Junto a él asistieron el vicegobernador Jorge Díaz, ministros y funcionarios, legisladores provinciales e intendentes.

Como cada 3 de mayo, la imagen del Cristo de la Quebrada, cubierta en una cruz de vidrio rodeada por claveles blancos y rojos, salió a la calle pasadas las 16:00 para transitar en peregrinación las principales calles del pueblo. Los fieles caminaron detrás del Cristo e hicieron una columna interminable de personas que acompañaron con aplausos y con rezos que se escucharon en todo el pueblo. La procesión salió desde la Iglesia y retomó la calle que en su final encuentra el Cementerio y la nueva autopista 25 de Mayo. Después giró hacia la izquierda y subió por la calle del acceso principal a la localidad.

Poggi  participó de la multitudinaria procesión del Cristo de la Quebrada

Poggi participó de la multitudinaria procesión del Cristo de la Quebrada

El paso se detuvo cuando el Santo llegó al atrio de la capilla. Allí monseñor Martínez habló del significado de agradecer y de perdonar: “Fue gratificante verlos durante estos tres días rezando a los pies del Santo. En ese tiempo tenemos que agradecer que el Santo nos permita volver a casa para dar gracias a nuestras madres por la comida que nos hizo. También es importante el perdón entre los esposos; tal vez no se puedan olvidar algunos inconvenientes vividos, pero sí se puede perdonar”. Ofreció sus bendiciones y agradeció la tarea de los colaboradores con la Iglesia para que las ceremonias diarias se realizaran sin inconvenientes.

En el interior de la parroquia, habitantes del pueblo, seminaristas, religiosas y sacerdotes colocaron al Santo en el altar para que los fieles pudieran saludarlo antes de volver a casa.

Nota: Catalina Ysaguirre

Fotos: Cristian Bastias

Video: Sergio Nieto