El rock que suena fuerte
domingo, 02 marzo de 2014 | 00:18

Efecto Bloc una banda que anda sin etiquetas

Una sala de ensayos, un grupo de amigos, dos nuevos integrantes y la emoción por el nuevo retoño, un disco que verá la luz este año; esto parece el cóctel perfecto del rock, si le sumamos una bebida fermentada y una siesta de verano.

Cuando el calor apremia en un barrio no hay nada mejor que la música y un buen aire acondicionado o un ventilador, pero dentro de una sala de ensayo la temperatura castiga con más fuerza,  Bruno Osorio (primera guitarra), Gonzalo Amieva (voz), Adriel Gómez (tecladista), Martín Loayza (bajista), Diego González (baterista), y Toni Lucero (segunda guitarra) los seis integrantes de efecto bloc pueden dar prueba de esto.

Los integrantes de la banda en pleno ensayo.

Los integrantes de la banda en pleno ensayo.

 Enero y febrero los encontró armando su primer disco en Sonnostudios “Vamos a meter 12 canciones, sentimos que son las mejores de esta etapa”, comenta Gonzalo el cantante del grupo.

La banda tiene en claro que quieren seguir metiendo fechas, es una forma de alimentarse. Pero la mira está puesta en el albúm que aún ni tiene nombre. “Queremos tenerlo en nuestras manos antes de que se acabe el año y consolidarnos con un material bien grabado, que lo podemos difundir en los lugares donde tocamos”, asegura Martín.

Cuando todo era el principio

La banda nació en Juana Koslay al principio con otros integrantes que tomaron otro rumbo. “El primer baterista de la banda fue Néstor Barreto; Martín Cabanes en guitarra, Pablo Ponce estuvo  en segunda guitarra y Manu Rossi en batería, por ese entonces tuvimos dos baterías”, recuerda Gonzalo.

“El primer demo fue en el bar de un amigo que nos quiere mucho, todo se hizo muy casero, había cinco canciones, canciones que  al pasar los años las transformamos y algunas de esas melodías las trabajamos para el CD”, agrega el cantante y las risas cómplices de sus compañeros rellenan esa escena.

Sonidos nuevos, integrantes nuevos

Diego y Ariel son los nuevos en la banda. Diego con su batería y sus golpes firmes le imprime al sonido cierta dureza, un toque diferente, Ariel con su teclado amplía la gama de melodías. “Yo los vi a los chicos en Komodo y ahí me invitaron a formar parte del grupo”, dice el músico.

Y también está Toni ´el guitarrista viajero´ como lo bautizaron los chicos,  también se incorporó a la banda. Toca cuando está de visita por tierras puntanas ya que vive en Córdoba.

Una banda que camina sin rótulos

Los seis músicos tienen claro que no hay nada que pueda encasillarlos, ya sea como una banda de Punk, rock barrial. “Definirnos nos limita-, asegura Gonzalo-. Nosotros si queremos podemos hacer esos sonidos, si podemos decir que el rock nacional es la base de todo esto”.

Un poquito de allá un poquito de acá todo suma y hace que Efecto Bloc suene como suena. “Tenemos todas nuestras propias influencias diferentes, pero lo que tratamos de hacer es  aportar cada uno, lo que sabe o le gusta de la música y tratar de armar algo que nos agrade a todos”, explica Martín.

“Tratamos de meter muchos cortes de cambio de ritmo y aprovechar las habilidades de cada uno en su instrumento, que se destaque y que el sonido de la banda sea consistente.  Por eso influencias te podría citar muchísimas”, agrega el cantante.

Pero todos tienen influencias completamente diferentes y quizás aquí radique la esencia de la banda.  Esto hace que cada canción de Efecto tenga su personalidad y  sea lo que es.

Vencer el miedo a las tablas

La primera presentación sobre el escenario del grupo fue hace dos años, más precisamente el 19 de julio del 2012. “Nosotros veníamos tocando desde el 2011, pero no queríamos salir a tocar hasta no estar seguros”, recuerda el guitarrista.

“Fue una experiencia única subir al escenario para tocar esas canciones que las ves nacer. Cuando estás arriba de alguna forma sentís que la gente te está juzgando. Pero la verdad es que nosotros siempre sentimos el apoyo incondicional del público”, agrega Gonzalo.

Han pasado dos años de invierno, ellos están seguros que esa sensación de nervios al subirse para enfrentar al púbico, ya la superaron.  “Ahora estamos con ganas de tocar, siempre estamos con la cabeza puesta en conseguir otro lugar, otra fecha”, resume Martín.

Algo más que palabras sueltas

Dicen que las letras son parte de ese engranaje que le da identidad a una banda. Efecto Bloc sabe que la metáfora con sus imágenes infinitas es su bastión. “Nosotros tratamos de hacer que las canciones sean de todos, que tengan un porqué y una razón para ser tocadas y cantadas que no sean palabras al aire”, dice Gonzalo. Y agrega que  hay varias canciones hechas por Martín y Bruno.

“En este proceso estamos revisando las canciones que ya tenemos. Nos gusta mucho eso de trabajar en equipo”, dice Martín.

Y Gonzalo acota algo que le quedó pendiente. “Lo bueno de eso es que uno cuando escribe una canción puede utilizar muchas imágenes para referirse a eso y después alguien que lo escucha puede interpretarlo de otra manera”.

Efecto Bloc tiene una meta para este año terminar el disco.

Efecto Bloc tiene una meta para este año terminar el disco.

Panorama del rock de acá

“Desde hace dos años que estamos tocando, desde el principio hasta el día de hoy vemos como muchas bandas han crecido y otras nacieron. Es importante la atención que presta la gente a la música de acá y es esto lo que necesita una provincia para que crezca. Apoyar a las bandas locales, esa es la materia prima”, expresa Martín y todo el grupo asienta con la cabeza.

La cultura de la música como estandarte. “Lo que hay que generar es conciencia”, concluye el cantante.

 

Nota: Noelia Domínguez

Foto y cámara: Jesica Flandes

Producción audiovisual: Flandes-Domínguez

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