Turismo San Luis

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miércoles, 26 febrero de 2014 | 08:59

La vivienda ocupa un lugar decisivo en el desempeño escolar

La provincia de San Luis es uno de los pocos distritos del país que ha garantizado el inicio del ciclo lectivo 2014 el 26 de febrero, en las 450 escuelas con las que cuenta. Casi el 60 % de esos niños vive en una casa digna construida por el Gobierno provincial.

La política habitacional es uno de los pilares de la gestión del gobernador Claudio Poggi, que contempla a la vivienda como una de las formas más efectivas para redistribuir la riqueza con la certeza de que, además, abordará otros aspectos trascendentales en el mejoramiento de la calidad de vida de los sanluiseños.

Los vecinos recibieron sus llaves de la mano del gobernador Poggi

Los vecinos recibieron sus llaves de la mano del gobernador Poggi

Miles de estudiosos de las problemáticas sociales que viven nuestro país y América Latina coinciden en afirmar que sin una vivienda que cumpla con las condiciones mínimas de habitabilidad, se complica el desarrollo pleno de las personas y en especial de los niños y niñas.

Uno de esos estudiosos es el Dr. Bernardo Kliksberg, un prestigioso economista argentino que junto a sus actividades científicas, de asesoría internacional y de docencia, desarrolla una amplia labor voluntaria en diversas organizaciones de servicio a la comunidad de la sociedad civil y es uno de los mentores de la ONG “Un techo para mi país”, por lo que en el tema habitacional también lleva años investigando.

Tomando en cuenta uno de sus profundos análisis al respecto, se destaca que una causa de deserción muy importante es el hacinamiento. ¿Dónde hacen los deberes los chicos de las villas miseria? Los hacen en medio del hacinamiento, y desde ya que su rendimiento escolar es absolutamente incidido por la falta de las condiciones más mínimas para poder vivir.

Desde la mortandad infantil hasta la deserción escolar, la vivienda es central. En realidad la vivienda es el resumen final de múltiples exclusiones sociales.

María Claudia no ocultó sus lágrimas de felicidad

María Claudia no ocultó sus lágrimas de felicidad

No tener una vivienda digna, es también con frecuencia, el drama de la falta de domicilio y eso a la larga perjudica a los jóvenes que buscan un trabajo, porque las empresas deben cumplir con ciertas reglamentaciones y sin un lugar físico donde ubicarlos, generalmente son rechazados.

La vivienda significa muchísimas cosas en la vida cotidiana, es un tema muy importante para la gente y por eso está en la agenda del Gobierno puntano desde 1983, lo que genera posibilidades concretas de que los chicos estudien, de que tengan baños en buenas condiciones y que haya agua potable, lo que significa que también mejoran las perspectivas de salud de la población.

Kliksberg se pregunta: ¿Cuánto vale tener una vivienda donde una familia pueda almorzar o cenar con los chicos? ¿Cuánto vale eso en términos de desarrollo de una sociedad? Se ha medido últimamente.

No hay posibilidad de que pueda haber una cena familiar si no hay condiciones, si no hay una vivienda social que garantice la mínima dignidad como para que pueda haber una mesa en la que se pueda reunir toda la familia. Los chicos que tienen la oportunidad de que en sus casas los padres cenen con ellos con frecuencia, tienen un desarrollo diferente que aquellos que no.

Viviendas recientemente entregadas en Papagayos

Viviendas recientemente entregadas en Papagayos

La diferencia es total; los chicos cuando están alrededor de una mesa familiar adquieren una serie de capitales. Tienen identidad generacional porque pueden dialogar sobre sus raíces, de sus familiares de lugares distantes, entonces pertenecen a un hilo generacional. Aprenden de lo que está sucediendo en la realidad, de las ocupaciones de sus padres, forman un razonamiento crítico, amplían su lenguaje.

Los que tuvieron una de esas familias tienen un desempeño en inteligencia emocional, equilibrio psicológico y desarrollo de sus capacidades cognoscitivas y de su razonamiento muchísimo mayor que los que no tuvieron esa infancia.

Las mesas familiares siguen siendo irremplazables; no hay ninguna otra estructura social que pueda educar del modo que lo hace una mesa familiar. Para que haya una mesa familiar tiene que haber una vivienda. Es por eso que es una herramienta primordial en el desarrollo educativo de los niños, niñas y adolescentes.

 

Nota y fotos: María José Barroso – Prensa y Comunicación del Ministerio de la Vivienda.