Volver a estudiar en una escuela digital

La necesidad interna de concluir una causa pendiente es el factor común de casi 3 mil sanluiseños que se sumaron a las escuelas digitales para adultos dela Universidad de La Punta (ULP). Con esa propuesta el Gobierno de San Luis ofrece una solución concreta a quienes por diversos motivos dejaron la escuela y deciden completarla. Actualmente, son 66 las sedes de la Escuela Pública Digital para Adultos (EPDA) en el territorio puntano. Se trata de los Centros de Inclusión Digital (CID) que la Universidad ha desplegado por la provincia, que funcionan también como cibers gratuitos fuera de los horarios de clase.

Los CID son espacios con unas 20 netbooks, con software educativo y conectividad de banda ancha dela Autopistadela Información, donde se imparten clases personalizadas a quienes quieren terminar la escuela, debido a que cada estudiante tiene una situación escolar particular. El uso de las máquinas convierte a la propuesta en un modelo uno a uno en el que sus alumnos además se incluyen digitalmente.

Adelina Fernández, alumna enLa Maroma, y Ester Rosa Jeri, egresada en Buena Esperanza contaron sus experiencias en la escolaridad digital. Adelina pasa los 60 años. Comenzó en marzo a estudiar y busca completar el primario. “Se presentó la oportunidad de poder terminar la primaria y me sumé. Me gusta la matemática y la historia. En agosto rendiré el primer módulo”, comenta, feliz. En cuanto a su relación con la tecnología, señaló que poco a poco va perdiendo el miedo, aunque confesó: “Me cuesta manejar la computadora”.

Sobre su voluntad por empezar de nuevo la escuela, dijo que se animó porque en su casa la alentaron. “Lo conté en casa y mi hijo me dijo que lo hiciera. Mi familia me apoya. Además, con el grupo de compañeros somos muy unidos. Nos ayudamos con las tareas. Espero poder terminar”, dijo.

En el caso de Ester es una flamante egresada de secundario de la escuela digital para adultos de Buena Esperanza. Pampeana de nacimiento y puntana por opción, vive y trabaja en Buena Esperanza desde hace 20 años. “Hice el secundario porque necesitaba tener el título. Fue una experiencia hermosa. En mi trabajo uso la computadora, pero manejarla para aprender fue fantástico”, comentó.

Con el sistema de las EPDA, los estudiantes cursan alrededor de 12 horas semanales. Para ingresar deben presentar el analítico de los estudios previos realizados. En base a ello se establecen equivalencias y el estudiante comienza su formación desde donde abandonó sus estudios. Los interesados pueden comenzar en cualquier momento del año.

Para finalizar el primario se estipula un tiempo mínimo de un año y seis meses, y para concluir el secundario, alrededor de tres años, los alumnos egresan con el título bachiller en economía y gestión de las organizaciones. Como parte del currículo escolar, los alumnos de los CID cursan la materia ‘Tecnología vinculada al trabajo’; en esa asignatura deben elaborar proyectos que desarrollen la tecnología, la comunidad y el trabajo. La materia culmina con la realización de un microemprendimiento de interés para la localidad.

Los planes de estudio están basados en los núcleos de aprendizaje prioritarios. Para esta iniciativa la ULP cuenta con el apoyo del Ministerio de Educación provincial los contenidos son elaborados por los expertos en recursos digitales dela ULP. Esta propuesta se enmarca dentro de la estrategia del Estado provincial de contar con ciudadanos alcancen la educación secundaria completa, con habilidades en matemática, lectura, escritura, ciencias y nuevas tecnologías.

Informes: ciu@ulp.edu.ar –Tel: 4452000-6089

Actualmente, son 66 las sedes de la Escuela Pública Digital para Adultos (EPDA) en el territorio puntano.