Gabriel Guillar entrena en el Campus Abierto ULP para hacer cumbre en el Himalaya

El montañista formará parte de una expedición que escalará el monte Manaslu, la octava montaña más alta del mundo. Será el único puntano del grupo. “Es un verdadero prestigio entrenar en el Campus. Quiero dar lo mejor de mí para poder flamear la bandera de San Luis en la cumbre”, expresó.

El montañista será el único puntano que formará parte de la expedición.

Con el apoyo del Gobierno de San Luis, atletas puntanos de diversas disciplinas llevan adelante sus entrenamientos en el Campus Abierto ULP “Arturo Rodríguez Jurado”, con el fin de mejorar su rendimiento y alcanzar diferentes metas. Tal es el caso del montañista e integrante del club Inti Anti, Gabriel Guillar (48), quien en los próximos días emprenderá viaje a Nepal para formar parte de una expedición que buscará hacer cumbre en el monte Manaslu (8.156 msnm), en el Himalaya, en lo que será la primera travesía de estas características en la historia de la provincia.

“Es un verdadero prestigio entrenar en el Campus Abierto ULP. Tiene una estructura y un grupo de profesionales que saben cómo trabajar con cada deportista para lograr los mejores resultados. Por eso, estoy muy agradecido por la tarea y la contención, ya que en este lugar le sumé a mi entrenamiento un marco de profesionalismo que antes no tenía; es un lugar espectacular que tiene mucho potencial”, comentó Guillar, quien además practica kayak, maratón y natación, entre otras actividades deportivas.

El atleta partirá desde San Luis el próximo 22 de agosto y arribará a Nepal el 24. Allí, junto a montañistas de Kosovo y Jordania, iniciará la aproximación al campamento base el 28 de agosto, para luego iniciar el ascenso. “Estaríamos haciendo cumbre durante la primera semana de octubre. Para mí es una alegría tremenda; por eso, quiero dar lo mejor para poder flamear la bandera de San Luis en la cumbre de la octava montaña más alta del planeta”, manifestó.

Como parte de su experiencia, el atleta hizo cumbre en el Aconcagua en tres ocasiones; remó 1.000 kilómetros en kayak por el río Paraná durante 12 días, y 900 kilómetros en el río Limay y el río Negro, en la Patagonia argentina. “Estoy convencido de que la relación entre el hombre y la naturaleza es muy apasionante, y sirve para sacar lo mejor de uno mismo”, concluyó.