Día Mundial del Corazón: hábitos para cuidar la salud cardíaca

Este jueves 29 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Corazón. El Ministerio de Salud de San Luis impulsa diferentes actividades para promover el cuidado y alertar sobre las enfermedades cardiovasculares. El infarto agudo de miocardio y el accidente cerebrovascular son las principales causas de muerte, enfermedad e invalidez en el mundo.

Los avances de la ciencia en estos últimos años en diagnosticar y tratar la enfermedad cardiovascular fueron notorios, pero la prevención cardiovascular, el control de los factores de riesgo, la adquisición de conductas cardiosaludables y la consulta al médico de cabecera siguen siendo objetivos a alcanzar.

Las enfermedades cardiovasculares no son transmisibles y se asocian a nuestras conductas y hábitos. Este es un día perfecto para dejar de fumar, comer sano y empezar a hacer actividad física. Es por ello que resulta clave promocionar las conductas cardiosaludables y no cesar en la advertencia sobre los daños de hábitos nocivos como el tabaco, comidas chatarra, la ingesta de sal y el sedentarismo.

En tal sentido, en San Luis capital, en el Hospital Cerro de la Cruz y en Villa Mercedes en el CAPS Tallaferro y en la Plaza San Martín se llevaron adelante charlas informativas, consejerías de factores de riesgo: alimentación, tabaco y actividad física, estimación del riesgo cardiovascular global sin colesterol a la población, control de presión arterial y controles nutricionales.

Mientras que las actividades continuarán este viernes en San Luis, en el Paseo del Padre, con un stand para donación de sangre y toma de presión arterial.

En esta edición 2022, la Federación Mundial del Corazón (FMC) nos invita a “USAR el Corazón”, es decir, a poner todo lo que esté a nuestra disposición para prevenir en tres áreas:

Usar el Corazón para la Humanidad:

Significa seguir comprometiéndose en una salud igualitaria y de equidad, indiferente de género, edad, raza y clase social. Comprometiéndose al acceso universal a los tratamientos, a la educación masiva de los profesionales y a la alerta para que todos tengan iguales posibilidades en todas las áreas terapéuticas. La FMC está comprometida en la promoción y repercusiones acerca de la prevención del infarto agudo de miocardio.

USAR el Corazón para la naturaleza:

Debemos comprometernos en promocionar leyes que prevengan la polución ambiental, causa demostrada de muertes cardiovasculares. Promover las leyes contra el tabaquismo y el fomento de la actividad física.

USÁ el Corazón para Ti:

Date un momento para descansar, para dormir adecuadamente, para disminuir el estrés. Si es necesario, con apoyo psicológico. Empezá una alimentación cardiosaludable, evitá el tabaquismo y el alcohol. Disfrutá de los paisajes de tu ciudad y costas. Es muy importante hacer actividad física y consultar al médico de cabecera.

Siete consejos para prevenir enfermedades coronarias

Si bien algunos factores de riesgo, como los antecedentes familiares, no se pueden modificar, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que la mayoría de las enfermedades cardiovasculares se pueden prevenir abordando hábitos conductuales.

Entre los más importantes, los especialistas señalan:

Llevar una dieta sana y equilibrada: aconsejan consumir alimentos saludables como verduras y cereales. Propone evitar la sal y los alimentos picantes que contribuyen a elevar la presión arterial y destaca la importancia de beber de 2 a 3 litros de agua cada día.

Hacer ejercicio regularmente: según la OMS, las personas que no hacen actividad física suficiente “tienen entre un 20% y un 30% más de probabilidades de morir prematuramente que aquellas que sí lo hacen”. No se recomienda una práctica específica, sino que sugiere elegir una actividad placentera para cada paciente.

No fumar: según la OMS, se estima que la exposición a productos derivados del tabaco es responsable del 10% de todas las muertes ocasionadas por ECV. Al dejar de fumar, el riesgo de enfermedad coronaria se reduce a la mitad dentro de 1 año. Además, recomienda evitar la exposición al humo del cigarrillo.

Evitar el alcohol: no existe un nivel seguro para beber alcohol y los efectos perjudiciales que produce superan ampliamente cualquier posible beneficio protector. Si bien beber menos puede reducir el riesgo de ECV, la evidencia muestra que la situación ideal para la salud es no beber nada.

Realizarse chequeos médicos periódicamente: esto contribuye a determinar y controlar el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Entre las mediciones más importantes la federación mundial destaca: la presión arterial, el colesterol y el nivel de azúcar en sangre.

Controlar el estrés: dado que “puede provocar que las arterias se contraigan, lo que aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas especialmente en las mujeres” revela la OMS. Y propone: “Hacer ejercicio, respirar profundamente, relajar los músculos y hacer tiempo para las cosas que el paciente ama, son algunas de las acciones que pueden ayudar a controlar los niveles de estrés”.

Consultar a un profesional de la salud y tomar la medicación recetada: es posible que los pacientes con mayor riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca o un accidente cerebrovascular deban tomar medicamentos para reducir su riesgo. Por eso, la OMS recomienda acudir a un especialista y tomar la medicación que le recete.