Amitrano: “Acá las manos duelen más”

La cartelera boxística que tenía como evento central la defensa del título mundial peso Ligero de la OMB (Organización Mundial de Boxeo) de Yohana Alfonzo, proponía interesante combates en la previa y uno de ellos era ver el debut profesional de Leonardo Fabio Amitrano. “Acá te ponen una mano clara y te voltean”, fue una de sus frases al finalizar su pelea.

Amitrano ganó por KOT en su pelea debut.

El pupilo del gimnasio “El Tata” de Villa Mercedes venía con antecedentes en el amateurismo que invitaban a presenciar su inicio en el campo rentado del boxeo.

Varios títulos provinciales en los Torneos “José María Gatica” organizados por el Ministerio de Deportes, un campeonato nacional representando a San Luis en el Selectivo 2014 de la FAB (Federación Argentina de Boxeo) que le valieron la convocatoria al seleccionado argentino “Los Cóndores” con la posibilidad de entrenar en el CeNARD con los mejores del país.

Surgido de la cantera misma del boxeo puntano, llegó a pelear en la Liga Mundial de Boxeo (World Series of Boxing) aquella noche en Potrero de los Funes frente a Gaybatulla Gadzhialiyev de Azerbaiján, un rival con experiencia y mano picante. Perdió pero Amitrano en esa ocasión se recibió de guapo porque jamás dejó de ir al frente aun en la adversidad.

A quien enfrentaba en el Palacio de los Deportes, el santafesino Mauricio Acuña, llevaba siete peleas, un mundo de diferencia, si de los primeros pasos se trata en esto del boxeo profesional. Si bien el natural de Coronda, registraba todas derrotas, el marco era propicio para dar el zarpazo y anotarse un triunfo en la casa de un contrincante con algún antecedente de amateur como los tenía el villamercedino.

Nada de eso ocurrió porque Amitrano pudo voltearlo dos veces en la primera vuelta y cuando parecía que terminaba antes que el público terminara de acomodarse en sus butacas, vino ese segundo round donde “dedo en el ojo” mediante (así lo contó Amitrano), Acuña colocó una mano que conmovió al debutante. Ahí se vio la “maña” de profesional del corondense bien aprendida para encausar una pelea que tenía destino de lona para él.

En la corta distancia, prevaleció la potencia del púgil mercedino.

La superioridad y potencia de Leonardo Amitrano finalmente se impuso cuando en el cuarto y último round, Acuña no respondía al castigo y el árbitro decretó el nocaut técnico.

Amitrano vivió así su primer pelea rentada: “Fue una experiencia muy linda porque, gracias a Dios, pude ganarle a un rival bueno y muy duro (se recuperó de dos caídas en el primer asalto). Pude sacar ventajas y definir la pelea a mi favor”, dijo ya cambiado y analizando su faena.

Amitrano estaba ante su gente, estaba acostumbrado a eso en los “Gatica” y también a la televisión en vivo, tras su paso por “Los Cóndores”. Pero el marco de la jornada era otro: había un título mundial en juego y los ojos de los que juzgan eran otros, tanto público como jurados, managers y promotores que reúnen noches como estas. Sin embargo tuvo “nervios de acero”.q

“No había nervios sino ansiedad. Quería subir al ring, tenía muchas ganas de estar ahí arriba y poder pelear como profesional, que ya es otra cosa. Es otra etapa. No es como en el amateurismo porque acá los golpes duelen más (y lo dijo haciendo referencia a ese episodio de la segunda vuelta). Una mano clara y te pueden voltear”, sentenció.

Finalmente llegó el turno de los agradecimientos: “A mis amigos, a ‘mi viejo’ (Alberto, su mentor en el gimnasio), al periodismo que me acompañó en todos mis pasos hasta aquí y a toda la gente que me vino a ver y que pude devolver tanto afecto con un buen resultado, por eso es que estoy muy contento”, concluyó.