Con investigaciones y propuestas de solución, los más chicos se comprometen con la Cuenca del Morro

Son alumnos de la EPA N° 11 “Dr. Carlos Juan Rodríguez”, pertenecientes a 2° y 5° grado de primaria, y a 5° año del secundario. Motivados por diferentes temáticas, como el relieve y las lombrices, llegaron a conocer la problemática que afecta a toda la provincia. Propuestas de solución y concientización sobre el cuidado del medioambiente forman parte del trabajo que desempeñan los chicos y que se vio reflejado en la Feria de Educación, Arte, Ciencias y Tecnologías, instancia escolar.

Los chicos de la primaria trabajan con lombrices y humus.

La emergencia ambiental en la Cuenca del Morro, producida por el desbalance hídrico y procesos de erosión y degradación de los suelos, es un tema central para el Gobierno de San Luis. La Provincia trabaja en soluciones concretas para mitigar sus efectos y promueve una fuerte concientización social sobre la temática.

Se puede pensar que si la emergencia es adoptada como propia por la sociedad, el compromiso de la gente ayuda a que las posibilidades de su solución se incrementen. Y esto es lo que sucedió con los chicos de la EPA N° 11 “Dr. Carlos Juan Rodríguez”.

Motivados por sus docentes, a partir de múltiples interrogantes que surgieron en clase, alumnos de 2º “C” y 5º “A” del nivel primario, y de 5º año “C” del secundario, trabajaron sobre la problemática de la Cuenca en la Feria de Educación, Arte, Ciencias y Tecnologías, instancia escolar. Son tres proyectos conectados entre sí y que, desde el interés de los chicos, buscan ayudar con diferentes alternativas para solucionar la problemática ambiental.

Los más grandes investigan

“Estábamos en clase viendo relieves y ríos, cuando un compañero preguntó sobre el nuevo río que va de Villa Mercedes a La Toma. Ahí arrancó el proyecto de investigación y fue algo que nos interesó muchísimo porque queremos saber más de la tierra puntana. Nos dimos cuenta que hace décadas era un terreno muy fértil pero en los últimos años, por el mal manejo de las tierras y por plantaciones estacionales que eran fugaces y después se levantaban, esa zona se fue quedando sin vegetación y se fue acumulando agua. Lo que pasa en la Cuenca es un tema muy lindo para estudiar”, aseguraron los alumnos del nivel secundario.

Una vez seleccionada la temática, los jóvenes observaron videos, analizaron el plan de forestación del Gobierno provincial y buscaron información. “Los chicos se entusiasmaron mucho a partir de dos intencionalidades: por un lado, porque vieron que la ciencia les puede dar respuestas y, por otro lado, el compromiso que los moviliza para revertir la situación”, expresó la profesora Laura Allende.

Los alumnos del nivel secundario se dedican a la investigación de la problemática.

Los más chicos producen

Los chicos de 2º “C” del nivel primario llegaron a la problemática de la Cuenca a partir de la investigación de los alimentos orgánicos y las lombrices californianas. “El papá de uno de los chicos sabía que estas lombrices producen humus y que es bueno para utilizar como fertilizante, ya que no posee químicos. Entonces, se lo agregamos a las plantas y nos dimos cuenta que, rápidamente, sus tallos crecían más fuertes y pensamos en incorporarlo a las especies con las que se foresta la Cuenca”, indicó la maestra Liliana Ramos.

Con sólo siete años, los alumnos ya entienden cómo funciona el proceso y son los que llevan adelante el cuidado de las lombrices: “El humus es lo que hace que la planta crezca más fuerte. Nosotros tenemos lombrices en el laboratorio que las alimentamos con cáscaras de huevo, de papa y de banana”, manifestaron los más pequeños.

Los curiosos de 5º grado también se sumaron

“Vimos en el laboratorio que los chicos de 2º estaban trabajando con lombrices y humus y les preguntamos si servía para las plantas. A partir de ahí hicimos muestras, queríamos ver qué planta germinaba más rápido, si la que tenía agua o la que tenía humus, y nos dimos cuenta que era la de humus”, afirmaron en conjunto tres alumnas comprometidas con la problemática. “Queremos ayudar a la Cuenca del Morro. Ese es nuestro objetivo principal”.

Su maestro, Ceferino Ortiz, completó el círculo y explicó la relación de todos los trabajos: “La idea es utilizar el humus líquido como fertilizante. Hicimos pruebas con diferentes suelos y semillas, y notamos las diferencias en las que se regaron con humus líquido. Creemos que esto funciona, resta probarlo a gran escala y poder proveer de esta experiencia para colaborar con el plan de la Provincia. Es una posible solución, una acción reparadora. Si el humus fortalece y agiliza el proceso de reproducción de las plantas, quizás podamos ayudar: esa es la vinculación de los tres proyectos”.

Nota y fotos: Prensa Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción.

Corrección: Berenice Tello.