MEDIO AMBIENTE
martes, 14 junio de 2016 | 21:44

San Luis expuso la experiencia de los humedales de Guanacache en el Congreso de la Nación

La presentación se dio en el marco de una nueva reunión de la Comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Senado nacional, donde se trata un proyecto de ley para establecer los presupuestos mínimos para la conservación, protección y uso racional y sostenible de los humedales de la Argentina. En este contexto, el titular de la cartera de Medio Ambiente, Campo y Producción, Cristian Moleker, presentó el trabajo histórico que lleva adelante la Provincia, desde 1992 con la firma del Pacto del “Nuevo Cuyo”, y que ya logró la recuperación de 10.000 hectáreas de los humedales de Guanacache.

La exposición tuvo lugar este miércoles en el Congreso de la Nación, al interior de una nueva reunión de la Comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable, presidida por Fernando “Pino” Solanas.

La exposición tuvo lugar este miércoles en el Congreso de la Nación, al interior de una nueva reunión de la Comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable, presidida por Fernando “Pino” Solanas.

La vasta experiencia de San Luis en materia ambiental, sigue siendo un ejemplo a nivel nacional. En esta oportunidad, el Ministro de Medio Ambiente, Campo y Producción, Cristian Moleker, viajó a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para presentar en el Congreso nacional las políticas impulsadas históricamente desde la Provincia para la recuperación de los humedales de Guanacache, Desaguadero y Del Bebedero.

La exposición tuvo lugar este martes en el Congreso de la Nación, al interior de una nueva reunión de la Comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable, presidida  por Fernando “Pino” Solanas. Este espacio de trabajo trata actualmente un proyecto de Ley de Protección de Humedales, que busca establecer los presupuestos mínimos para la conservación, protección y uso racional y sostenible de cada uno de estos lugares del país.

En este contexto surge la convocatoria a San Luis, a fin de interiorizarse sobre el histórico trabajo que lleva adelante la provincia en esta materia y que ya logró la recuperación de 10.000 hectáreas de humedales.  Del encuentro también participaron Organizaciones no Gubernamentales como Green Peace, Fundación Vida Silvestre, entre otras de diferentes partes de la Argentina.

 

Un trabajo a imitar

 

Con la firma del Pacto Legislativo y Ambiental del “Nuevo Cuyo” en 1992, el entonces gobernador Adolfo Rodríguez Saá, logró -por primera vez- el compromiso de Mendoza y San Juan para proteger los bosques nativos y los humedales de Guanacache. El segundo gran paso llegó en 2010, cuando el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá firmó un convenio histórico con la provincia de Mendoza, para realizar estudios de impacto ambiental y de factibilidad.

En San Luis, desde el 2007, los Humedales de Guanacache se encuentran categorizados como sitio RAMSAR de importancia internacional (la denominación refiere a la ciudad donde se firmó el Convenio de los Humedales). Éstos se ubican en una zona árida-semiárida y de alta fragilidad dada las condiciones del suelo, flora y fauna.

En esta zona, cualquier cambio provoca alteraciones y desequilibrios como fue la desertificación cuando bajó el caudal del Río Desaguadero. La baja del caudal se debió a la utilización, en exceso, del recurso hídrico por parte del hombre en las provincias de San Juan y Mendoza. Esta situación ocasionó una completa desaparición de los humedales en San Luis, dejando improductivas tierras que en algún momento brindaron refugio, comida y sustento económico a los pobladores de la región.

A partir de esta situación, San Luis inició la construcción de dos azudes (represas) interprovinciales (San Luis-Mendoza) para subir artificialmente el lecho del río al nivel original y posibilitar que, cuando llegan las crecidas, desborde nuevamente el río. Con estas acciones se tiende a regenerar los humedales y recuperar la biodiversidad de la zona. Además, se busca frenar la desertificación del área que avanza más allá de los límites de Guanacache.

Por otro lado, la restitución de los humedales favorece el arraigo rural deteniendo la migración de las culturas originarias a sectores no desérticos y fomentando las economías locales. Asimismo, la construcción de los azudes genera una alternativa turística y deportiva en una zona que abarca humedales de una longitud mayor a los 27 kilómetros.

Nota: Prensa Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción.

Foto: Gentileza Matías Ceballe.