Orgullo y tradición puntana

Carruajes de épocas de antaño, símbolos de la tradición, fueron algunos de los tantos atractivos del Festival Nacional del Caldén.

Carruajes de épocas de antaño, símbolos de la tradición en el Festival Nacional del Caldén.

Como fusionando el pasado con el presente en el camino del progreso y la inclusión hacia el futuro, los transportes de tracción a sangre, verdaderas joyas de nuestra cultura, estuvieron presentes en la 10ª edición del Festival Nacional del Caldén.

Héctor Carrizo, un villamercedino de 72 años, fue el responsable de uno de los carruajes que recorrieron el predio y la localidad de Nueva Galia; “este carruaje tiene 120 años”, dijo Carrizo y agregó que “ésta es una reliquia de gran valor de la tracción a sangre, hace a nuestra historia; estoy muy orgulloso de poder mostrarlo en este lugar como en tantos que visitamos y que los jóvenes y sus familias conozcan más de nuestra historia”. Héctor, con mucha emoción en sus palabras, señaló que comparte estos momentos con su familia. “Venimos siempre a desfilar al Caldén y a todos los lugares donde se revaloriza nuestra tradición”, aseguró.