MUNDIAL DE BÁSQUET ESPAÑA 2014: la previa al clásico
sábado, 06 septiembre de 2014 | 15:36

De padres e hijos

Argentina buscará que la paternidad juegue su papel por los octavos de final del Mundial. Brasil tiene más equipo, pero a la vez más presión porque nunca puede con la Selección y necesita ya meterse en una pelea importante. Un clásico con todos los condimentos, este domingo, a las 17 (televisa Canal 13). Todo el análisis en Agencia de Noticias San Luis.

Scola sigue a Huertas. Argentina siempre lo libera y, a la vez, aisla de sus grandotes. ¿Repetirá?

Scola sigue a Huertas. Argentina siempre lo libera y, a la vez, aisla de sus grandotes. ¿Repetirá?

Para Argentina es sumar otro hito. Agregarle más páginas a un libro de oro. Pocos estaban confiados antes del torneo por tres motivos: las bajas (sobre todo de Manu y Delfino), lo mal que había jugado el equipo y las dudas que sobrevolaban a los nuevos integrantes. Pero, si bien la Selección no ha descollado en este Mundial, su juego subió un escalón, algunos de los jóvenes respondieron en momentos importantes (Laprovittola, Mata y Safar, en ese orden) y los intangibles de siempre han jugado su papel. Las estrellas de siempre, Scola, Prigioni y Nocioni, inspiran a todos de una manera inexplicable. Y todo eso que no se ve, juega. Como la paternidad contra Brasil. Como el conocimiento del rival. Como que las características de un adversario sudamericano le caen mejor que las de los europeos. Por eso, si bien la Selección llega de punto y a nadie podría sorprender una derrota, hay confianza en que la historia se repita este domingo desde las 17 (televisa Canal 13), en el Palacio de los Deportes de Madrid.

Para Brasil, es ahora. O parece que no será nunca. Lo necesita. Le urge. Se lo exigen. Ya no puede fallar en momentos decisivos. Y menos contra Argentina. Una derrota, este domingo, podría terminar con el buen ciclo de Rubén Magnano como su DT. Los dirigentes brasileños, que lo bancaron pese al Desastre de Caracas (Brasil ni siquiera pasó la primera ronda en el Premundial 2013) y pusieron el dinero para ser invitados, no se bancarían quedarse otra vez en la puerta de la pelea grande y menos una cuarta derrota ante Argentina en una instancia decisiva. “Hay necesidades de victorias, de ganar algo. Argentina ya lo ha demostrado. Brasil debe hacerlo. Es una materia pendiente”, acepta el coach cordobés que dirige a la Verdeamarela desde el 2010.

Por eso gran parte de la presión estará en los hombros brasileños. Por esa necesidad, por la paternidad y por ser favorito. “No lo somos”, dice Magnano, sacándose presión. Pero el mundillo del básquet sabe que Brasil llega jugando mejor (venció a Serbia y Francia, dos top) y con un equipo más completo, rodado y armado. “Están todos, es el mejor equipo que podemos armar. Y hay un gran compromiso”, asegura Rubén. Argentina, en cambio, arriba con lo justo. O, es más, le falta y se nota en los baches y la dependencia de Scola que sufre por momentos. Por eso sólo pudo ganar los partidos que debía y los otros, ante potencias europeas como Croacia y Grecia, los peleó con más corazón que juego, sin chances reales de ganarlos pese a las remontadas.

Así terminó Argentina luego de eliminar a Brasil en Londres 2012. Claro, estaban Manu y Delfino...

Así terminó Argentina luego de eliminar a Brasil en Londres 2012. Claro, estaban Manu y Delfino…

“Lo anímico puede pesar, pero para eso tenemos que jugar bien y llegar a un final peleado”, asegura Julio Lamas, el DT argentino. En el pasado, Huertas se lució pero no se hizo jugar a sus compañeros, Tiago perdió siempre los duelos con Scola y Nené nunca se bancó las piñas de Nocioni. Y eso puede sentirse en el parquet, aunque pocos lo reconozcan. “Cada torneo es una historia distinta. Y los equipos no son los mismos que en el 2012”, avisa Luifa. Con razón. En el 2011 y 2012 estaban Manu y Delfino. Así y todo, costó mucho. ¿Y ahora? Será del archirrival? El convencimiento brasileño asoma como clave. “Es el momento de ganarle a Argentina”, dice Alex, sin miedos. ¿Se sacará la espina?

El duelo, en el juego, como una partida de ajedrez. Lamas se debate entre mantener la misma estrategia que ha dado resultados en el pasado: liberar al base Huertas, dejarlo anotar pero que no conecte el perímetro con las tres torres, Tiago, Varejao y Nené. “Creo que es lo que hará”·, aventura Magnano. “Quizás. O no. Manejamos dos planes”, contesta Lamas, con una sonrisa, sin querer adelantar nada. En el entrenamiento de este sábado, Argentina practicó la que usó en el 2010, 2011 y 2012. ¿Cuál será la contra táctica de Magnano? En los bancos también habrá gran duelo. “Será clave pararle el contraataque y equiparar el rebote”, asegura Lamas. “Y limitar las pérdidas”, suma Campazzo.

Argentina sabe que tiene que jugar muy bien. De bien para abajo será casi imposible. En el pasado, en los clásicos, la Selección sacó su Alma. Y Brasil, no.