Nelly Omar, la gran cantora nacional, falleció a los 102 años

Por la Revolución Libertadora de 1955, debió abandonar su profesión, pero regresó en la década siguiente y nadie la detuvo. Con 102 años continuaba presentándose en diversos festivales y recitales.

Nelly Omar

Fue llamada “La Gardel con polleras” y el actor Enrique de Rosas la definió como “La voz diferente”. Desarrolló una breve carrera cinematográfica. Era la última representante de la generación dorada. Fue la madrina del 6º Festival Internacional de Tango en Justo Daract, en el año 2010.

Con el fallecimiento de Nelly Omar, esta mañana en su domicilio, se va la última sobreviviente de una estirpe dorada de cantantes de la música popular habitada por nombres como los de Tita Merello, Azucena Maizani, Libertad Lamarque y Ada Falcón.

La “cantora nacional”, como le gustaba ser denominada, no es sólo un nombre fundamental de la música popular argentina, sino que materializa en la actualidad la trascendencia de una memoria afectiva ligada al primer peronismo.

Nilda Elvira Vattuone nació en Guaminí el 10 de septiembre de 1911. A pesar de que inició su carrera artística en 1924, su período de esplendor ocurrió en los años 1930 y 1940, destacándose por sus versiones de “Callecita mía”, “Sólo para ti”, “Latido tras latido” e “Intriga y pasión”.

Nelly Omar en el 6° Festival Internacional de Tango

Aun con los problemas de salud que la aquejaban, propios de la edad, la artista popularmente reconocida como peronista, a la que se conoció como “la Gardel con polleras”, festejó sus 100 años, en noviembre de 2011, con un recital en el Luna Park.

Fue relacionada sentimentalmente con el compositor Homero Manzi, de quien se dice que le compuso el tango “Malena”. Nelly dijo que “Sur” y “Solamente ella” también le hacen referencia.

Ha recibido múltiples premios y honores, como haber sido declarada Ciudadana ilustre de la Ciudad de Buenos Aires en 1996 y Embajadora del Tango en 2010. También recibió múltiples premios como el Raíz en 2007, el Clarín Espectáculos en 2009 y el Pablo Podestá en 2010.

• Su paso por San Luis

San Luis supo de su voz y vitalidad a través del Festival Internacional del Tango, realizado en la ciudad de Justo Daract, donde Nelly Omar fue la madrina.

En el año 2007, por iniciativa del entonces gobernador Dr. Alberto Rodríguez Saá, el Salón Blanco de la Casa de Gobierno se colmó de militantes peronistas para recibir en una jornada muy emotiva a la cantora nacida en Guaminí. Allí se le entregó la distinción máxima que el Gobierno de la Provincia otorga a quienes contribuyen con la grandeza de nuestra tierra y embajadores como Nelly: ‘Pueblo Puntano de la Independencia’”.

Amiga íntima del periodista y conductor de Villa Mercedes, Martín Marín, juntos recorrieron diferentes escenarios de la provincia de San Luis y realizaron siete programas especiales recorriendo San Luis; Guaminí, tierra de la provincia de Buenos Aires donde nació Nelly; la Plaza de Mayo; la casa del general Perón; y el mítico estadio Luna Park. Esas obras producidas por Martín Marín obtuvieron el máximo galardón: El premio Nacional Martín Fierro al Mejor Programa de TV Nacional de Música Rubro Tango, del año 2010.

La cantora nacional Nelly Omar y el periodista Martín Marín, galardonados con el premio Martín Fierro

Símbolo y signo de nuestra música ciudadana: el tango.

Nelly Omar estuvo 17 años sin trabajar por estar en una lista negra impuesta por la revolución, una mujer a la que el público elevó a la cima de “gran cantora nacional”, la misma que conoció el silencio por defender sus ideas y supo ganarse el respeto y la admiración de todos por mantener intactas sus convicciones. Peronista de Perón y amiga de Evita. En una entrevista hace algunos años atrás, y haciendo referencia a estos años, dijo, “Como felizmente o desgraciadamente no tenía a nadie a quien darle de comer, porque no tengo hijos, me las fui arreglando sola. Pero claro, tuve que vender el piano”.

Protagonista indiscutida de la historia musical de la Argentina. Figura legendaria de un país que creció entre un sinfín de sueños y prohibiciones, supo abrazarse al afecto de los humildes, convirtiéndose en un personaje llamado a habitar para siempre la memoria inextinguible de su pueblo.

Nota Fernando Romero

Fotos Web