Contribuir a la igualdad de género es ayudar a prevenir la violencia

El Ministerio de Inclusión Social informa que desde el Subprograma Mujer y Comunidad se dictaron talleres para la “Inclusión de la perspectiva de género en el Nivel Inicial”. Estuvo destinado al personal que desarrolla tareas en los Jardines maternales gubernamentales.

Año tras año, los estereotipos de cómo ser niña/mujer y niño/hombre son gestados no sólo en los hogares de cada familia sino que se reproducen desde la primera infancia escolar. Por este motivo, el Subprograma Mujer y Comunidad impulsó la creación y ejecución de talleres para “la inclusión de la perspectiva de género” en los jardines maternales de la provincia de San Luis, a fin de instaurar la equidad dentro del ámbito público y privado.

La escuela es el segundo lugar donde niñas y niños aprenden a forjar su identidad mediante las políticas del sistema educativo, y a su vez son las educadoras y los educadores quienes durante el día están expuestos a construcciones sociales difundidas a través de los medios de comunicación y el modelo hegemónico del patriarcado.

Ante esta problemática de la desigualdad de género, el Subprograma Mujer y Comunidad, dependiente del Ministerio de Inclusión Social, propuso la creación y ejecución de talleres para la “Inclusión de la perspectiva de género en el Nivel Inicial”.

Como prueba piloto, en el Jardín Maternal ‘Evita’, de la ciudad de San Luis, se capacitó el mes pasado a 14 educadoras comprometidas a brindar contención, cuidado y educación a más de 20 niñas y niños de 45 meses a 3 años de edad.

La jefa de este Subprograma, Soledad Salvi, conformó un equipo de trabajo integrado por dos psicólogas del Gabinete Psicológico, Jurídico y Social, las licenciadas Natalia Santarelli y Natalia López Picón, y dos estudiantes de la Licenciatura en Comunicación Social, Noibé Páez y Marcela Videla, quienes desde mediados de 2012 comenzaron las prácticas pre-profesionales, a cargo de su tutora académica, Irma Ortiz Alarcón.

Para el diseño y la planificación de los talleres, ambas comunicadoras realizaron un diagnóstico comunicacional en el Jardín ‘Evita’, ubicado en la calle General Paz y Julio Roca. El objetivo de la capacitación fue promover la reflexión y la inclusión de la perspectiva de género en las políticas de educación del Nivel Inicial, con la colaboración de quienes integran la Institución.

El resultado final fue la reflexión personal que cada integrante del Jardín expresó acerca de la importancia del rol educadora/educador, en la construcción de la equidad de género y, por ende, en su aporte para lograr una sociedad con menos violencia sobre las mujeres.

Dicho resultado se cumplió con el trazado de dos ejes: uno fue el uso de las palabras, ya que “lo que no se nombra, no existe”. Tanto de las entrevistas como de las observaciones no participantes, se pudo verificar que usar términos como ‘nosotros’, ‘niños’, ‘chicos’, se está excluyendo el ‘nosotras’, ‘niñas’, ‘chicas’. Esta forma de nombrarnos está incorporada de manera inconsciente desde cuando nacemos, por lo tanto, se promocionó la utilización del lenguaje inclusivo, dentro y fuera del Jardín.

El segundo eje, el uso y facilitación de los juguetes, se puso en escena con la actividad de la proyección de imágenes de distintos productos, como cocinita, muñeca, soldados y otros muñecos, que las educadoras debían escoger para regalar a una niña o un niño. La posibilidad de regalarle una cocinita o una muñeca a un varón es estimular a temprana edad el buen desempeño en la paternidad, el compromiso en la cocina y con otras tareas del hogar, las que desde hace muchos años han estado delegadas solo a la mujer.

Aplausos y frases de agradecimiento coronaron las actividades brindadas por las talleristas, quienes desarrollaron esta iniciativa entendiendo que contribuir con la igualdad de género es ayudar a prevenir la violencia.

Contribuir con la igualdad de género es ayudar a prevenir la violencia.